Como presidente del Foro Español de Pacientes, Andoni Lorenzo expone en esta entrevista las tres preocupaciones fundamentales del movimiento asociativo al que representa en medio de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus: equipos de protección para los profesionales sanitarios; que los pacientes crónicos puedan recoger sus medicamentos en las farmacias convencionales, sin necesidad de tener que acudir a los centros de salud o a los hospitales, e información veraz sobre la pandemia, para lo que aconseja acudir a fuentes fiables.

Por otra parte, destaca la solidaridad y la humanidad que están demostrando, día a día, los españoles. “Con el apoyo de todos superaremos la situación; saldremos adelante”, apostilla.

Como máximo responsable del Foro Español de Pacientes, ¿cómo ve la crisis a la que nos estamos enfrentando?

A nadie se le escapa que la situación es dramática y estamos especialmente preocupados porque las personas a las que representamos constituyen un colectivo especialmente vulnerable que soporta un riesgo añadido.

¿En qué se concretan las mayores preocupaciones?

Desde el Foro tenemos mensajes esenciales que trasladar a toda la ciudadanía, a todas las asociaciones de pacientes y a todas las personas frágiles o con alguna discapacidad. La primera es nuestra profunda preocupación por la situación de los profesionales sociosanitarios, que sufren una escasez de medios que está provocando que los pacientes no estén atendidos en las mejores condiciones. Comprendemos y nos hacemos cargo de que la situación es muy complicada, una verdadera avalancha, pero también entendemos que hay que dotar a los profesionales de los medios adecuados. Esta es la primera gran reclamación que estamos planteando.

¿Y en relación con la dispensación de medicamentos?

Esa es otra de nuestras demandas. Tenemos que pensar que en España hay 19 millones de personas con patologías crónicas y en muchos de estos casos son pacientes que necesitan acudir periódicamente a su centro de atención primaria y a sus hospitales. Estamos reclamando al Ministerio de Sanidad que, ya que ha decretado el Estado de Alarma y tiene la competencia y la máxima autoridad, que decrete o establezca algún tipo de orden clara, urgente y concreta para que todos esos medicamentos pasen a dispensarse en las oficinas de farmacia convencionales. En España contamos con 22.000 farmacias, con lo que prácticamente cada ciudadano tiene una a cinco minutos de su casa, y pedimos que los pacientes no tengan que acudir a los centros de salud o a los hospitales porque son focos de posibles contagios y, no lo olvidemos, estamos hablando de los pacientes de más riesgo. Resolver esto es muy urgente.

¿Consideran que se está dando la información adecuada?

Esa es nuestra tercera gran preocupación. Vemos que hay una saturación de información. Da igual el tipo de medio de comunicación, porque absolutamente en todos sale el tema de coronavirus y esto crea una cierta angustia y perjudica a la ciudadanía en general pues genera una ansiedad y un estado de nerviosismo muy perjudicial.

Un exceso de información puede producir precisamente el efecto contrario: la desinformación. Reclamamos que de alguna forma se dosifique toda esta información. Estamos observando en la ciudadanía cuadros de ansiedad y nerviosismo un tanto preocupantes. Es muy importante insistir en que los ciudadanos acudan a medios fiables y creemos que en este momento la información más fiable es la que ofrece el Ministerio de Sanidad, además de otras como las webs de las organizaciones de pacientes que siguen las recomendaciones científicas, Somos Pacientes o Farmaindustria.

¿Se está prestando una asistencia equitativa en todas las comunidades?

Entendemos que sí. El gran problema que estamos percibiendo, como ya he apuntado, está relacionado con la falta de medios, y ahí es donde se empiezan a producir ciertas diferencias. Pero eso no lo observamos ni siquiera entre comunidades distintas, sino dentro de una misma región o provincia. Creo que aquí, por honestidad, hay que resaltar el papel que está cumpliendo la sanidad privada, que se está volcando de una manera ejemplar y está desarrollando una labor muy importante para ayudar a la sanidad pública y poniendo a disposición de ésta todos los medios que tiene.

Pero insisto en que el gran problema es la falta de medios. Los médicos, las enfermeras, los auxiliares… son los primeros que necesitan medidas de protección. Hemos tenido una reunión con el Foro Europeo de Pacientes y nos han comunicado que en Chipre hay tres hospitales que se han cerrado porque los médicos están contagiados y están contagiando a los pacientes. Esto es un gran riesgo y por eso es una de nuestras mayores preocupaciones. Demandamos medios de protección para nuestros profesionales.

¿Han detectado desde el Foro algún tipo de desabastecimiento de medicamentos?

No. En principio no hemos detectado ningún problema en este sentido. Otra cosa es la forma de distribución, que es donde se producen situaciones de angustia, pues estamos hablando de pacientes que tienen problemas serios, problemas crónicos. Son pacientes diana en los que el coronavirus puede hacer más daño. Como ya comenté, es muy arriesgado que los pacientes o personas mayores o con discapacidad, para conseguir su medicación, tengan que ir al ambulatorio o al hospital.  

¿Cómo resolver esas situaciones?

No nos cansamos de insistir, como he comentado, en que desde las farmacias hospitalarias y ambulatorios se haga que la dispensación de fármacos vaya a las farmacias comunitarias. Somos líderes en Europa en cuanto a establecimientos de farmacia. Son farmacias que están atendidas por profesionales que tienen una muy buena formación. En ellas el paciente va a encontrar a un profesional que le va a explicar cómo debe tomar esa medicación si tiene algún tipo de duda. Nos preocupa, como estamos detectando, que las medicaciones se estén dispensando vía mensajería, porque creemos que no es la forma más adecuada ni más segura.

¿Cuál es la principal demanda del Foro para los pacientes crónicos?

Estamos escuchando continuamente hablar del problema, sin duda terrible, que se está produciendo en las residencias de ancianos, pero nadie habla de la situación de los pacientes crónicos, que también son personas con elevado riesgo. Necesitamos protegerlos minimizando los riesgos a los que se enfrentan.

Finalmente, ¿qué mensaje dirigiría a los pacientes?

Creo que, pese a una situación tan terrible como la que estamos viviendo, con tantas personas contagiadas y tantos fallecidos, hay que resaltar algo trascendental y que estamos observando en todas partes: la solidaridad, la humanidad, la unidad y la profesionalidad. La convicción de que si todos trabajamos juntos saldremos de esta.

Pone la carne de gallina ver a los ciudadanos saliendo a las ventanas para aplaudir a quienes lo están dando todo por los demás. Nuestros profesionales de la salud están agotados pero siguen entregados a su misión. Hay que confiar en ellos y también en otros trabajadores también fundamentales que están haciendo una labor extraordinaria. Los españoles estamos demostrando, una vez más, que somos solidarios y que con el trabajo y el esfuerzo de todos saldremos adelante.