Concretamente, el trabajo revela que el 28,9% de las personas atendidas en 2006 en las consultas de Atención Primaria padecía depresión, porcentaje que en el año 2010 se elevó hasta el 47,5%. Y asimismo, que mientras en 2006 un 1,4% de la población atendida en las consultas presentaba problemas con el abuso del alcohol, en 2010 la cifra era del 6,2%.
Crisis y trastornos mentales
La razón para estos incrementos, según establece la Fundación Congreso Catalán de Salud Mental (FCCSM) en su informe ‘Qué crisis estamos sufriendo, cómo afecta a la salud y cómo saldremos adelante’, se explica por «la precarización del empleo, el paro, la inestabilidad económica y la pobreza; y es que muchas de las personas que actualmente acuden a los servicios sociales de Atención Primaria por causas directamente relacionadas con la crisis manifiestan tener sensaciones de pérdida de control de su propia vida, sentimiento de inutilidad e ideas de muerte«.
El resultado es que el porcentaje de personas en riesgo de desarrollar un trastorno mental ha pasado de un 14,1% en 2006 a un 21,7% en 2011. Un incremento que resulta especialmente significativo en la población masculina.
No en vano, la respuesta de la población ante la actual coyuntura económica no es homogénea y difiere según el género. Como explica el doctor Lluís Albaiges, miembro del comité organizador del congreso, «ante la crisis las mujeres reaccionan con cuadros depresivos y con somatización, mientras que los hombres actúan, seguramente por los condicionamientos culturales, agravando el consumo de ciertas sustancias, sobre todo el alcohol».
– A día de hoy, 316 asociaciones de pacientes dedicadas a los trastornos mentales son ya miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?
