Ya llegó el Carnaval, un derroche de color, entusiasmo, alegría y desparpajo, ya llegó ese esperado día, en el que cada uno puede convertirse en quien desee…
Y desde ADIEM quisimos sumarnos a la celebración que en este mes llena las calles de toda la localidad.
Disfrutando de una tarde en la que no faltó el baile, un animado desfile, unas cuantas canciones desafinadas de karaoke y una buena chocolatada para tod@s.
Un caballero y una dama medieval, un diablo y una monja, un chino y una hormiga, un post-it y un payaso, un médico y un pirata, junto con un grupo de pingüinos fueron los protagonistas de esta agradable velada.
¿Y cuál fue el resultado? El mejor que podíamos esperar, una tarde llena de sonrisas para recordar.
En las siguientes líneas, uno de los miembros del jurado ha querido compartir su valoración con nosotros:
Como presidenta del jurado del carnaval, quiero comentaros que dimos nuestros votos valorando al disfraz de hormiga con el tercer premio, a uno de los pingüinos con el segundo y al caballero medieval el de mejor disfraz, porque estaba hecho a mano.
Tuvimos una fiesta, con chocolate para todos. Hubo muchos disfraces, en los que todos intentamos colaborar participando en la elaboración.
El tercer premio se llevó un despertador, el segundo una cajita de madera tipo joyero, y el tercer premio un juego de dominó.
Porque una tarde entre sonrisas fue nuestra mejor terapia, os animamos a participar en la próxima edición.