¿Cómo definiríais Globeathon para todos aquellos que no conozcan la iniciativa?
Globeathon consiste en una jornada mundial de concienciación sobre el cáncer ginecológico, que incluye al cáncer de ovario-trompas, útero-endometrio, cérvix, vagina y vulva. Se trata de un encuentro organizado simultáneamente en diferentes ciudades del mundo. Allí se realizan eventos destinados a dar voz al cáncer ginecológico y a poner en evidencia la relevancia de la implementación adecuada de los mecanismos de prevención, diagnóstico y tratamiento del cáncer ginecológico.
¿Cómo surgió la idea?
Globeathon es una iniciativa de un grupo de médicos y pacientes afectadas en Estados Unidos cuya principal misión es la de aumentar la conciencia del cáncer que afecta a los órganos de la reproducción femenina, identificar las disparidades globales de atención, y superar las barreras (étnicas, raciales, políticas, geográficas, económicas, culturales y religiosas) a través de la extensión educativa y el compromiso global de la comunidad.
En el primer año, 2013, el evento fue organizado simultáneamente en 130 ciudades de 60 países del mundo. En su segunda edición, en el año 2014, los encuentros fueron distribuidos durante todo el mes de septiembre, asignando una semana para cada continente en particular.
¿El proyecto agrupa todos aquellos cánceres que afectan a la mujer; creéis que sería interesante que todos los cánceres ginecológicos se unieran bajo una misma asociación, institución o entidad?
No sería una mala idea. Sin embargo, no habría que olvidar que cada tipo de cáncer ginecológico tiene unas características diferentes que requieren un entendimiento y enfoque individualizado. Por ejemplo, el cáncer de cérvix es el único que tiene un método de detección precoz y habría que enfatizar que las mujeres lo cumplan. El cáncer de ovario, por otro lado, es el tumor ginecológico más agresivo y se diagnostica en etapas avanzadas en más del 80% de los casos con lo que el tratamiento especializado y multidisciplinar son pilares fundamentales para su manejo más apropiado.
¿Qué países están más concienciados desde el punto de vista social con aquellos cánceres que afectan a la mujer?
Estados Unidos, Australia, junto con Japón y los países de Europa occidental son los más concienciados ya que cumplen en gran medida con las campañas de prevención de cáncer de cérvix y cuentan con la formación profesional y la infraestructura adecuada para tratar a las mujeres con cáncer ginecológico. Sin embargo, también hay que mencionar que aún allí todavía queda mucho por seguir trabajando para mejorar el sistema de atención de las mujeres
Desde el punto de vista de la investigación, ¿cuál es el país de referencia para el cáncer de ovario? ¿Dónde tenemos que mirar?
Estados Unidos e Inglaterra son dos de los principales países referentes en cáncer de ovario. Son países con grandes inversiones en investigación molecular y en el desarrollo de políticas orientadas a la centralización del tratamiento. Esto último es motivado porque el tratamiento del cáncer de ovario es uno de los principales ejemplos de cómo un tratamiento quirúrgico realizado por profesionales adecuadamente preparados puede mejorar significativamente la supervivencia en relación a los profesionales sin el entrenamiento para tal fin. Sin embargo, tal como lo demuestra un reciente estudio realizado en Estados Unidos, tan sólo un 4% de las mujeres con cáncer de ovario en estadios avanzados son operadas por ginecólogos oncólogos en centros especializados. Por lo tanto, las ideas están pero el camino por recorrer aún es muy largo.
¿Qué reivindicación haríais a las instituciones?
Las instituciones tienen un rol fundamental en el entendimiento y gestión del problema. Han de apostar por la formación profesional e intentar implementar políticas de centralización del manejo de estas enfermedades tan complejas. Ésta, según informan los estudios, parece ser la forma más beneficiosa para obtener los mejores resultados de calidad y cantidad de vida para las pacientes.