Unidos por la salud

Pertenece y transforma la comunidad de pacientes

Entrevista con la presidenta de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes

Carina Escobar: «Somos un agente sanitario social más y tenemos nuestra propia voz»

Estrenamos nuestra nueva plataforma con una de las figuras más representativas en el entorno de las personas con enfermedades crónicas: Carina Escobar, presidenta de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP). En esta entrevista nos habla de la importancia de contar con la experiencia y la voz del paciente y de su participación efectiva en el sistema sanitario; de la llamada Ley de Equidad y de la necesidad de mejorar el acceso a las terapias innovadoras; de sus proyectos para formar, informar y concienciar a la sociedad sobre aspectos relacionados con su salud; y de los retos a los que se enfrentan las asociaciones de pacientes en este momento.

Uno de los pilares del trabajo de la POP es lograr una mayor participación de los pacientes en el diseño de políticas públicas. ¿Cómo valora el nivel actual de implicación en los órganos de decisión sanitaria?

Nosotros, como entidad, estamos trabajando en lograr esa participación efectiva en políticas sanitarias: con el Ministerio de Sanidad, con las consejerías autonómicas, etc. Pero también intentamos que nuestra experiencia como pacientes pueda ayudar a cambiar los procesos asistenciales y a mejorar la manera de tratar la cronicidad.

La valoración que hacemos en estos diez años que hemos cumplido es que el salto ha sido importante. Si echamos la vista atrás, nos damos cuenta de que se nos invitaba a participar de alguna manera, pero nuestra presencia no era tan visible. Ahora el Ministerio nos ha ido abriendo puertas para que podamos participar en estrategias, en planes y, sobre todo, para tener un diálogo continuo, entendiendo que somos un agente sanitario social más y que tenemos nuestra propia voz.

Es importante que tengamos una voz legítima y que nos acompañe todo el sector en este sentido. Sólo falta legislar y que esto haya venido para quedarse y convertirse en una oportunidad para todos, para que participemos en procesos de investigación, de ciencia abierta, de evaluación de tecnología sanitaria… Europa ya nos los está pidiendo. El protagonismo que va a tener el paciente nos va a ayudar a priorizar y realmente atender esa atención central en las personas que requerimos.

Hablando de legislar, ¿cómo cree que debería regularse esta actuación del paciente?

De momento estamos esperando a que comience a funcionar el Foro Abierto de Salud, incluido en la llamada Ley de Equidad del SNS. Es una manera de formalizar la actividad de las entidades de pacientes dentro del Ministerio de Sanidad, lo que marcará qué tipo de interlocución entre ambas partes, en qué órganos podremos participar y quiénes.

Desde el Ministerio se debe velar por alcanzar una participación legítima, que formen parte de estos foros las personas o las entidades que sean realmente la voz de los pacientes en España, voces responsables, serias y éticas que estén avaladas.

¿Y qué pasos deben darse para ello?

Nosotros siempre pensamos que el conocimiento fundamental. Debemos formarnos y también invertir para formar a otros, y fomentar un cambio de cultura relacionado con el papel del paciente, que debe ser más activo con su propia salud y más corresponsable con el sistema. En este sentido, la POP invierte una gran parte de sus recursos en mejorar la actividad asociativa.

El objetivo es que estemos más preparados para hacer reivindicaciones políticas, para participar en estrategias, para evaluar la tecnología sanitaria y para formar parte de proyectos como el que tenemos con el el Instituto de Salud Carlos III, para desarrollar de manera conjunta proyectos de investigación. Esto ya se está haciendo, y lo hacemos con garantías porque nuestra gente está formada. Siempre intentamos ir un paso por delante ya que, para hacerlo bien, tenemos que ser responsables.

Muchos pacientes desconocen sus derechos o no saben cómo ejercerlos. ¿Qué acciones se están llevando a cabo desde la POP para empoderarlos en este sentido?

A nivel individual, cada una de nuestras entidades tiene capacidad para poder informar a las personas a las que atiende de los derechos que tienen. Nosotros como plataforma tenemos la clínica legal, a la que llegan muchas consultas. Por ejemplo, nos preguntan mucho por los derechos que se tienen cuando una aseguradora te deniega sus servicios cuando aparece una patología seria y se necesitan determinados tratamientos. O también dudas que surgen en el plano laboral.

Son preocupaciones de la ciudadanía en general y de nuestros pacientes en concreto, y nosotros tenemos que ofrecerles información veraz a través de las entidades que forman parte de la POP. Esto se consigue también con los diferentes estudios de investigación que realizamos. Por ejemplo, estamos a punto de presentar el informe ‘Impacto de la enfermedad crónica en mujeres mayores cuidadoras‘, uno de nuestros colectivos más afectados e invisibilizados. Y tenemos otros muchos, gracias a ello podemos actuar desde el lobby con datos suficientes para conseguir una buena incidencia política.

Si tuviera que identificar tres prioridades para mejorar la calidad de vida de los pacientes en España, ¿cuáles serían y por qué?

Pues para nosotros es fundamental que, de verdad, busquemos un proceso asistencial pensado en las personas, y conseguir con ello diagnósticos precoces, porque en este sentido estamos en una situación bastante complicada. España tiene 17 comunidades autónomas y dos ciudades autónomas, todas ellas con diferentes sistemas de salud que repercuten en la equidad. Desde Sanidad se debe saber qué se está haciendo en cada una de ellas y tomar medidas contundentes que mejoren el acceso de los pacientes a cirugías, pruebas de diagnóstico, etc.

Debemos aportar no desde la crítica, sino de la construcción, para ir mejorando porque la situación está siendo bastante complicada para los pacientes, especialmente para aquellos con una cronicidad compleja. Se necesita una estrategia compartida para abordar estas cronicidades complejas, que incluya planes de continuidad asistencial, que retome la atención domiciliaria y que conecte la atención primaria con la hospitalaria.

Los pacientes necesitamos un acompañamiento. Los ciudadanos, en general, necesitamos que se trabaje en salud. Eso sí, también nosotros debemos responsabilizarnos de nuestra salud desde que nacemos hasta que nos vamos de este mundo.

En este sentido. ¿Qué estrategias deberían implementarse para fomentar campañas efectivas de concienciación y diagnóstico temprano?

Hay mucho que hacer en el ámbito de las enfermedades prevenibles y en la promoción de la salud. Reducir el número de pacientes con patologías cardiovasculares, con cánceres evitables… todo ello se basa en la transformación cultural, de los hábitos de vida y de que la ciudadanía asuma que la salud es lo más importante, algo que a veces sólo entendemos cuando la perdemos.

Tenemos que incidir más en las campañas de prevención primaria, la realización de cribados para el diagnóstico temprano. Cada vez están entrando en la cartera de servicios públicos más posibilidades alcanzar un diagnóstico temprano, muy importante en enfermedades como el cáncer. El problema son los tiempos, que se tarden meses en actuar tras el diagnóstico.

Hay que poner sobre la mesa esas brechas, esas listas de espera interminables, porque lo que conseguimos con ello es tener una mayor concentración de personas con cáncer, con más dolor y sufrimiento, lo que significa un impacto negativo en sus vidas y también para el propio sistema. Es algo que debemos revisar de forma detallada.

En lo que respecta a la innovación, ¿en qué escenario estamos actualmente?

La verdad que los datos no son buenos. Creemos que la nueva regulación va a cambiar también los tiempos de acceso a la innovación por parte de los pacientes en España. En este entorno, todos los actores nos hemos puesto a trabajar para mejorar el ciclo de aprobación de un fármaco y ser más transparentes en este aspecto.

Como ciudadanos tenemos el derecho a saber cómo se ha aprobado un fármaco, cuánto tiempo se tarda y por qué, cómo se negocia, quién está implicado en la evaluación de tecnología sanitaria. La nueva reglamentación va a añadirle transparencia al proceso de la innovación, ahora mismo nos falta trazabilidad. Debemos saber qué entra en la cartera de productos y servicios del Ministerio y su aplicación en las comunidades autónomas, porque hay sitios donde no llega, una falta de equidad que también debe contarse.

¿Cómo se podría fortalecer el avance en la investigación?

Desde nuestro punto de vista, en el ámbito de los ensayos clínicos el paciente no debe considerarse sólo como receptor de la innovación, sino como un actor principal que forme parte del desarrollo desde sus inicios. Sobre todo porque muchos de nosotros tenemos enfermedades complejas que conocemos muy bien, habiendo pasado por diferentes dianas, sabiendo cuáles son las necesidades no cubiertas.

No introducir desde fases iniciales la voz del paciente nos hace perder oportunidades. Por eso el anticuado sistema con el que funcionamos tiene que cambiar y estar acorde con esa ciencia que está avanzando a pasos agigantados.

En este punto es obligado hablar de enfermedades raras. ¿Cree que se está trabajando adecuadamente en este sentido?

Bueno, creo que vamos por el buen camino: hay una estrategia europea, un compromiso de las autoridades y a nivel político con las personas y con las familias que padecen este tipo de enfermedades. Tenemos una entidad como FEDER, totalmente legítima, que incluye a todo el movimiento asociativo de enfermedades raras y que forma parte de la POP. Están trabajando una manera muy seria tanto a nivel nacional como europea, y tienen una presencia bastante activa.

¿Qué medidas proponéis para mejorar la coordinación entre los diferentes niveles asistenciales y garantizar un enfoque integral en el cuidado de los pacientes con enfermedades crónicas?

Para nosotros es fundamental que el contexto de pacientes evolucione hasta personas con enfermedades crónicas, y que el enfoque de los resultados en salud también se fije en lo social, no sólo en lo sanitario. Es decir, es importante saber qué mueve a esa persona, qué necesidades tiene y cómo se le puede acompañar, y para ello es esencial fortalecer la atención comunitaria y llevar la salud hacia lo local, cerca de las personas.

Necesitamos además un sistema sanitario más flexible, que podamos recurrir a él cuando lo necesitemos, pero también ser conscientes del coste que todo ello acarrea para que todos sepamos usarlo mejor. Además, hay que dar mayor visibilidad y apoyo a todas esas cuidadoras invisibilizadas, y ofrecer una mejor atención a las personas con cronicidad compleja, que necesitan tener una persona de referencia en el sistema para evitar estar de un lado para otro cuando son varios los especialistas que les tratan.

Hay que profundizar en esa atención centrada en las personas, hemos evolucionado de tratar el órgano a cuidar al paciente y hay que dar un salto más para que todos nos podamos corresponsabilizar. Llevar a cabo procesos que lleven a un nuevo cambio, que también requiere de una apuesta política conjunta y consensuada por la salud de las personas.

Para finalizar, ¿cuáles dirías que son los principales desafíos a los que se enfrentan las asociaciones de pacientes en estos momentos?
Presentación de ParticipACCION, iniciativa de la POP

Teniendo en cuenta nuestra experiencia creo que un punto importante es hilar una buena cohesión interna, estar unidos para dar pasos hacia adelante y avanzar. Debemos saber posicionarnos y profesionalizarnos para trabajar de una forma más fluida y obtener el reconocimiento de la sociedad y de los agentes del sector salud haciéndonos hueco en los espacios de participación, tanto a nivel local como regional y nacional.

Son retos en los que estamos trabajando, intentando perfilar indicadores que nos sirvan como guía. En este sentido tenemos en marcha la iniciativa ‘ParticipAcción‘, con la que estamos generando esos indicadores que ayudan a las entidades y a las autoridades sanitarias a poder organizarse mejor para que la participación de los pacientes sea más efectiva.

Por otro lado, también es todo un reto la sostenibilidad: somos un agente que está siempre presente, dando servicio a nivel social. Pero económicamente estamos infrafinanciados. Hacemos las cosas de una manera muy voluntaria porque queremos ayudar a todas esas personas que están viviendo nuestra misma experiencia de sufrimiento, porque queremos que las cosas cambien. Pero para poder mantenernos en el tiempo, necesitamos apoyos y reconocimiento. Esos son los retos a los que nos enfrentamos.

Te damos la bienvenida a la nueva plataforma web de Somos Pacientes, que va más allá del rediseño: quiere ser el fiel reflejo de la evolución del movimiento asociativo a lo largo de la última década y adaptarse a las necesidades de los pacientes, sus familias y las organizaciones que los representan como colectivo. Doce años después de su nacimiento como iniciativa de la Fundación Farmaindustria, Somos Pacientes se ha reinventado para fortalecer su misión como espacio de encuentro, comunicación y participación en el ámbito del asociacionismo en el entorno paciente. Y quiere seguir evolucionando a través de la comunicación y las sugerencias de las cerca de 2.000 organizaciones que conforman la plataforma.

Nueva web de somos Pacientes

La web incorpora herramientas para facilitar el acceso a la información y fomentar la colaboración con las entidades registradas, que tendrán un espacio mucho más completo para darse a conocer e incluir noticias y convocatorias propias. Además, mejora su motor de búsqueda, así como la visibilidad de su Mapa de Asociaciones, ideal para encontrar de una manera más sencilla el nombre, las fórmulas de contacto y la localización de las organizaciones que más puedan interesar a los usuarios de la web.

Más accesible e intuitiva

Desde su creación, Somos Pacientes se ha consolidado como un referente en la comunicación y visibilidad de las asociaciones en España, recogiendo necesidades y propuestas de sus entidades usuarias. Ahora, con esta renovación, Somos Pacientes da un paso adelante, poniendo en el centro de su estrategia el empoderamiento de las asociaciones y la mejora de la experiencia para todos sus usuarios.

Su renovación tiene como principal objetivo ofrecer un entorno web más accesible e intuitivo, diseñado para que cualquier usuario pueda navegar sin barreras. Para ello, se han implementado estándares internacionales de accesibilidad que garantizan una experiencia inclusiva y adaptada a las necesidades de un público diverso.

Además, la nueva interfaz es mucho más sencilla de usar, con un diseño moderno y funcional que permite a las asociaciones gestionar sus contenidos de manera autónoma y eficaz. Esta apuesta por lo intuitivo no sólo facilita la interacción entre los usuarios, sino que también refuerza el carácter colaborativo de la plataforma.

Espacios personalizados

Somos Pacientes siempre ha trabajado por dar visibilidad a las iniciativas de las asociaciones, y esta nueva web no es una excepción. Entre las novedades más destacadas se encuentra la posibilidad de que cada organización tenga un espacio personalizado, donde pueda publicar sus noticias, eventos y proyectos. Esto permitirá a las asociaciones difundir su labor de una forma más directa y efectiva, conectando con sus públicos de interés y creando sinergias con otras entidades.

Asimismo, la plataforma ha habilitado un sistema para que los usuarios puedan enviar sugerencias y propuestas, reforzando así su carácter participativo. Somos Pacientes quiere que esta nueva web sea un proyecto vivo, capaz de adaptarse a las necesidades cambiantes del movimiento asociativo y de los pacientes.

Un lanzamiento en el corazón del movimiento asociativo

Aunque ya está operativa, su ‘puesta de largo’ oficial se dará en la gala de entrega de los X Premios Somos Pacientes, que tendrá lugar hoy, 4 de diciembre, en el Palacio Neptuno de Madrid a partir de las 18 horas. Este evento, que reunirá a representantes de asociaciones, profesionales sanitarios y otros actores clave del ámbito de la salud, es una oportunidad única para mostrar cómo la plataforma se alinea con los valores y objetivos del movimiento asociativo.

Además, durante la gala se reconocerán las mejores iniciativas impulsadas por las asociaciones en el último año y se subrayará la importancia de seguir avanzando juntos hacia un modelo de salud más participativo e inclusivo. En este contexto, la nueva web de Somos Pacientes se perfila como una herramienta estratégica para fortalecer el tejido asociativo y mejorar la comunicación entre sus miembros.

Organizado por la Liga Reumatológica Española (LIRE)

Reclaman una actualización de la Estrategia Nacional de Enfermedades Reumáticas

Congreso Enfermedades Reumáticas

El VI Congreso Nacional de Pacientes y Profesionales de Enfermedades Reumáticas y Musculoesqueléticas (Erymes) ha finalizado con un llamamiento al entorno público para revisar y actualizar la Estrategia Nacional de este tipo de patologías, presente en el Sistema Nacional de Salud (SNS). Organizado por la Liga Reumatológica Española (LIRE), los participantes del evento recordaron que este plan no ha sido modificado desde su creación en 2012, y reclamaron una revisión urgente que refleje los cambios demográficos, tecnológicos y sociales de la última década.

El encuentro reunió a expertos, médicos y pacientes para abordar los retos y avances en el manejo de estas enfermedades, que afectan a 120 millones de europeos, de los cuales 12 millones se encuentran en España. Estas patologías representan una de las principales causas de discapacidad física y también una significativa carga económica, con costes equivalentes al 2% del PIB de la Unión Europea.

Durante el congreso, representantes de LIRE, la Sociedad Española de Reumatología (SER) y OpenReuma unieron sus voces para exigir una acción inmediata por parte de las autoridades. Según Ana Vázquez, presidenta de LIRE, «es esencial que trabajemos en un sistema más inclusivo y equitativo, que contemple la realidad actual de las enfermedades reumáticas y musculoesqueléticas«. Estas enfermedades, subrayó, han evolucionado en los últimos años debido al envejecimiento de la población, la pandemia de covid-19 y los cambios en las necesidades de los pacientes.

Recomendaciones clave para la nueva estrategia

El congreso también sirvió para visibilizar las desigualdades entre comunidades autónomas en el acceso a tratamientos y diagnósticos, así como la necesidad de integrar políticas transversales que incluyan la perspectiva de género y la salud mental, dos aspectos íntimamente relacionados con las enfermedades reumáticas. «La estrategia debe adaptarse al contexto actual para garantizar una atención integral que tenga en cuenta a los grupos más vulnerables», enfatizó Raquel Almodóvar, vicesecretaria de la SER.

Por otra parte, los ponentes señalaron otros puntos esenciales que deben tenerse en cuenta en la revisión del plan, como el impacto del envejecimiento poblacional. Es decir, la creciente proporción de personas mayores que requiere adaptaciones en los sistemas de atención, considerando la cronicidad y los costes asociados. Y la incorporación de avances tecnológicos, ya que en la última década han aparecido nuevas herramientas para el diagnóstico temprano y el seguimiento de estas enfermedades.

Además de la revisión del plan, los expertos destacaron la importancia de invertir en salud preventiva. Factores como el aumento de la obesidad y la falta de actividad física están exacerbando la prevalencia y el impacto de estas enfermedades. «Es necesario implementar políticas públicas que fomenten un estilo de vida saludable desde edades tempranas», afirmó Laura Cano, presidenta de OpenReuma.

    Un impacto masivo en la sociedad

    Las enfermedades reumáticas y musculoesqueléticas son la principal causa de discapacidad física en Europa y afectan directamente a uno de cada cinco europeos. Además, pueden aparecer a cualquier edad, incluyendo en niños y adultos jóvenes, desafiando la idea de que son exclusivamente enfermedades asociadas al envejecimiento.

    Estos trastornos no sólo reducen la calidad de vida de los pacientes, sino que también están vinculados a otras enfermedades graves como el cáncer, las enfermedades cardiovasculares y la diabetes. Según la Alianza Europea de Asociaciones de Reumatología (EULAR), el coste económico anual de estas enfermedades en la UE asciende a 240.000 millones de euros.

Se tiende a pensar con excesiva frecuencia que la infancia y la adolescencia son épocas idílicas de la vida, en las que la nota predominante es la seguridad y la capacidad de disfrute. Hasta no hace muchos años se suponía que en la infancia no existía la depresión. No es ni mucho menos así. Nuestros menores pueden sufrir, como los adultos, trastornos del estado de ánimo que, de no atenderse adecuadamente, pueden derivar en una disminución importante de su bienestar global, en fracasos en su aprendizaje o, incluso, en intentos -a veces consumados- de quitarse la vida.

depresión en niños

De hecho, la Organización Mundial de la Salud sitúa la depresión entre las causas más frecuentes de discapacidad en estas edades. En no pocos casos, las depresiones infantiles y adolescentes no diagnosticadas ni tratadas se convierten en depresiones cronificadas que se arrastran durante el resto de la vida en forma de trastornos afectivos que pueden ser menos agudos pero mantenidos durante años, así como muy discapacitantes, conocidos técnicamente como distimias.

Las cifras sobre la frecuencia de depresiones en personas menores de 18 años varían, entre otros motivos por la falta de estudios serios sobre el tema y la tendencia a pasar por alto este problema. No obstante, son preocupantes. Los rangos más admitidos oscilan entre 3 a 6 de cada 100 menores. Esta cifra varía según el grupo de edad considerado y el género, pues las niñas y adolescentes parecen estar en mayor riesgo. La pandemia ha disparado esas estimaciones que algunos estudios llegan a cifrar hasta en el 30%, de las cuales el 6% del total serían depresiones graves.

Cómo son los síntomas depresivos en menores

Los menores presentan síntomas depresivos similares a los que caracterizan a cualquier edad aunque, a veces, pueden ser más sutiles y mostrase más como irritabilidad o rabietas que como tristeza franca o
tener más evidencias en la conducta (falta de actividad, aislamiento, abandono de aficiones, cambios de apetito y sueño) que en la vertiente más propiamente psicológica.

Los cambios en la sociabilidad, en los patrones de sueño y/o alimentarios, la pérdida de vitalidad e interés en las aficiones habituales, el retraimiento o los estallidos emocionales frecuentes deberían ser indicios que alertaran a los adultos que rodean al menor para considerar que este está iniciando un episodio depresivo. La intervención precoz y adecuada reduce el riesgo de una evolución negativa, de complicaciones e incluso de recaídas posteriores.

Por qué se deprimen más los niños y adolescentes

Niños, niñas y adolescentes se deprimen por razones diversas. La predisposición familiar influye, pero no es ni la única razón ni algo inamovible. La calidad afectiva y material del entorno del menor resulta una clave fundamental. Disponer de los medios económicos básicos, tener acceso a una alimentación y cuidados materiales correctos, o una educación de calidad constituyen pilares básicos para el bienestar emocional de la infancia y la adolescencia.

Los vínculos sanos con los progenitores, la familia y la comunidad resultan un factor primordial para proteger la salud afectiva de los menores. De hecho, se sabe que un entorno suficientemente protector y a la vez promotor de la autonomía puede modificar la influencia de posibles vulnerabilidades genéticas, disminuyendo la probabilidad de que se expresen factores constitucionales que, en un contexto insano, se harían manifiestos. Así lo han mostrado los estudios llevados a cabo con gemelos criados en ambientes favorables o presididos por obstáculos, privaciones materiales y emocionales e incluso malos tratos.

Podemos aspirar a prevenir la depresión en edades tempranas y a tratarla evitando que se cronifique y se convierta en una enfermedad que se prolongue en la edad adulta. Los menores tienen derecho a que sus depresiones reciban la asistencia adecuada. Esta puede consistir en intervenciones psicológicas tanto a nivel individual como familiar, pero no solo.

Cuando la gravedad lo requiere, no se puede optar por prescindir de lo que aportan los tratamientos biológicos. Los fármacos bien prescritos y adecuadamente usados son seguros en la infancia y la adolescencia. Negar este hecho y privar de recursos válidos a nuestros hijos e hijas constituye una discriminación e irresponsabilidad que va a condicionar vidas que están todavía construyéndose. Los tabúes y tópicos erróneos son especialmente peligrosos cuando se aplican en estas edades.

El miércoles 4 de diciembre, a partir de las 18.00 horas, tendrá lugar el acto de entrega de los X Premios Somos Pacientes en Madrid. Un acto cargado de emoción y de sorpresas que podrá seguirse online a través de nuestro canal de Youtube y, como no podía ser de otra manera, de la plataforma Somos Pacientes.