Afasia

La afasia no es una enfermedad. Es un síntoma que aparece debido a una lesión en el cerebro y a la pérdida de neuronas, y que altera la capacidad de la persona para comunicarse con los demás. Puede provocar dificultades tanto para expresarse oralmente como para comprender, leer y escribir. Las personas que padecen afasia pueden presentar otros problemas como la dificultad para hablar debido a un déficit de movimiento de los músculos de la boca, la cara y del sistema respiratorio, así como dificultades del cerebro para coordinar los músculos necesarios para decir las palabras. En algunos pacientes pueden darse, además, problemas con la deglución.

Es consecuencia de un fallo en el sistema nervioso debido a una lesión en las partes del cerebro responsables del lenguaje, situadas en el hemisferio izquierdo en la mayoría de las personas. Una de las causas más frecuentes de este trastorno es el accidente cerebrovascular, que se produce cuando un vaso sanguíneo se bloquea o rompe, lo cual impide que el flujo de sangre llegue a todo el tejido cerebral. La falta de oxígeno acaba provocando la destrucción de las células del área afectada.

En ocasiones, esta alteración del lenguaje puede ser transitoria (como puede ocurrir en pacientes con epilepsia, con migraña con aura o con ataques isquémicos transitorios), en otras persisten mientras se manifieste la enfermedad (ictus, infecciones como una encefalitis- o un tumor cerebral) y en otras forman parte de una enfermedad neurodegenerativa como el alzhéimer o la demencia frontotemporal. No obstante, las principales causas de la afasia son: ictus, traumatismo craneoencefálico, infección, tumor cerebral, o algún tipo de enfermedad neurodegenerativa.