«Esta realidad nos preocupa mucho porque esas personas van a conocer su problema cuando surja una complicación u otra dolencia, a veces grave, secundaria a la diabetes; hay que prevenir esa situación», añade el máximo responsable de FEDE, una organización nacida hace 25 años «con el objetivo de agrupar a las asociaciones dispersas hasta entonces, agrupar voluntades y hablar con una sola voz en la lucha por la protección de los pacientes».
Además, Cabrera reclama una asignatura escolar centrada en la salud y concluye afirmando que un paciente informado es fundamental de cara a la prevención de las importantes complicaciones que produce esta enfermedad cuando su control no es el adecuado.