Como recuerda FECMA, «estas pruebas de cribado son la mejor alternativa posible para el diagnóstico de esta enfermedad y la causa de que el de mama se haya convertido en uno de los tumores con mejor pronóstico».
Así, y en respuesta a la confirmación, la pasada semana, por parte del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad de que las mamografías –junto con otras pruebas y tratamientos– serán una de las primeras prestaciones a analizar en la revisión de la Cartera de Servicios, FECMA recuerda que «la implantación de programas de cribado en todas las comunidades es uno de los logros más importantes en cuanto a políticas de diagnóstico precoz de la enfermedad existentes en nuestro país, y todos ellos han sido promovidos por el sistema público de salud y con acceso gratuito«.
No al ahorro en el cáncer
FECMA asume la necesidad de impulsar políticas de control del gasto público. Sin embargo, rechaza que las medidas de ahorro y control vayan contra la calidad de los servicios y las prestaciones que recibe el paciente oncológico.
Así, y como concluye en su comunicado, «lamentaríamos que una decisión precipitada borrara los esfuerzos de las administraciones sanitarias promoviendo las campañas de detección precoz de cáncer de mama, los esfuerzos de muchas mujeres que han trabajado por desarrollar y mejorar los resultados de esas campañas y el trabajo de los profesionales de la sanidad, formados y comprometidos con la detección precoz del cáncer de mama mediante los programas de cribado».
– A día de hoy, 18 asociaciones de pacientes dedicadas al cáncer de mama ya son miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?
