Este programa de rehabilitación en línea durante el confinamiento ha tenido por objetivo mantener la calidad de vida de los pacientes y sus familiares trabajando la autonomía y el bienestar de los afectados para así retrasar su dependencia y evitar su exclusión social ante la situación planteada por la COVID-19.

El proyecto ha sido desarrollado por tres fisioterapeutas, tres terapeutas ocupacionales, tres logopedas, tres psicólogos y tres trabajadores sociales, profesionales que acometieron su labor desde sus propios domicilios.

Entre otros resultados, el proyecto ha posibilitado continuar con el programa de rehabilitación multidisciplinar y adaptarlo a las circunstancias consecuentes con la COVID-19; mantener la autonomía de los usuarios; evitar situaciones de aislamiento y soledad; mejorar la calidad de vida de los pacientes y de sus cuidadores; formar a los usuarios en el manejo de las nuevas tecnologías; y aumentar los sentimientos de control de la situación y de cómo responder antes las dificultades, adquiriendo recursos para la solución de los problemas cotidianos y la toma de decisiones.