El XXXIII Congreso de la Sociedad Española de Nutrición (SEÑ) concluyó el pasado mes de junio con una llamada urgente sobre la situación crítica que atraviesa la nutrición en España. Los científicos presentes en el congreso advirtieron que hay que controlar el consumo de azúcares, grasas saturadas y sal, ya que su ingesta excesiva está asociada con el desarrollo de patologías como obesidad, enfermedades cardiovasculares y otros problemas de salud.

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En este sentido, María Dolores Mesa García, catedrática de la Universidad de Granada, destacaba la importancia de controlar los azúcares en la dieta para evitar la obesidad y el síndrome metabólico, recomendando un consumo de azúcares libres inferior al 10% de la energía total y al menos 25 g/día de fibra. En lo que respecta a los ácidos grasos saturados (AGS), Javier Sánchez Perona, del Instituto de las Grasas-CSIC en Sevilla, enfatizaba que “reducir los AGS disminuye el colesterol LDL y el riesgo cardiovascular, sugiriendo un enfoque integrador que reemplace AGS con grasas insaturadas y carbohidratos ricos en fibra”.

Por su parte, Carmen Tenorio Jiménezdel Hospital Universitario Virgen de las Nieves en Granada, subrayaba la necesidad de reducir el consumo de sodio para evitar enfermedades cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer, abogando por iniciativas efectivas en colaboración con la industria alimentaria y la sociedad, debido a que el consumo de sal en España sigue siendo elevado. Además, se puso de relieve la importancia de llevar a cabo intervenciones como el ejercicio físico, dietas modificadas y suplementos específicos para enfrentar condiciones como la sarcopenia desde atención primaria, reflejando un enfoque integral necesario para mejorar la salud pública en el país.

Un abordaje holístico de la nutrición

Para la comunidad científica, la nutrición debería considerarse de una manera holística, abarcando la necesidad de analizar patrones de vida saludables, en los cuales, además de la alimentación y la nutrición, se incorpore la actividad física como parte fundamental para lograr un estado óptimo de salud. A este respecto, Ana Grifols, de la Universitat Rovira I Virgili y Nutriexper España, presentaba un estudio sobre las estrategias de nutrición e hidratación en maratones y ultramaratones de montaña, destacando la importancia de la nutrición y la hidratación para mejorar el rendimiento y prevenir la fatiga y la deshidratación en los atletas. En la misma línea, Francisco J. Amaro-Gahete, del Departamento de Fisiología de la Universidad de Granada, añadía que “el ejercicio es esencial para la salud cardiometabólica y que sus beneficios pueden variar entre hombres y mujeres, lo que requiere intervenciones personalizadas”.

Además, un reciente estudio que ha presentado en este congreso Borja Manuel Martínez Téllez, investigador del Ramón y Cajal y de la Universidad de Almería, mostraba que niveles más altos de actividad física están relacionados con una mayor diversidad de la microbiota fecal en adultos jóvenes, subrayando así, la importancia de la actividad física no solo para la salud cardiometabólica sino también para la salud intestinal.