Más del 20% de las 950 asociaciones y federaciones que conforman Plena Inclusión, miembro de Somos Pacientes, finalizaron 2022 con graves pérdidas económicas. De hecho, el pasado año se produjo un incremento del número de entidades que, pese a tener una larga trayectoria y un reconocimiento de su labor tanto por los usuarios como por las administraciones públicas, ven amenazada su continuidad en una situación de precariedad de medios extrema.
Como alerta la Comisión de Sostenibilidad de Plena Inclusión, “pese a consolidarse como una de las más numerosas y activas en el Tercer Sector, nuestra Confederación está sintiendo con especial intensidad la penalización que supone, por ejemplo, el IVA soportado en la compra de bienes y servicios, que se une al impacto que representa, como para el resto de la sociedad española, la subida de los precios y la inflación”.
Ante esta situación, la Confederación, que cuenta con 46.000 profesionales que desarrollan su tarea en más 4.000 centros y servicios, considera urgente encontrar vías estables de interlocución con las comunidades autónomas que, a través de una transición sostenible, faciliten la financiación de los servicios sociales que prestan a las personas con discapacidad intelectual y del desarrollo y sus familias.
Pedro del Río, experto en sostenibilidad y desarrollo organizativo de Plena Inclusión, explica que “el Tercer Sector se halla en un momento crítico que obliga a diseñar soluciones basadas en la innovación y la transformación de las políticas de los cuidados. No podemos perder este tren de la inclusión porque de él dependen, por ejemplo, más de cuatro millones de personas con discapacidad”.
Sea como fuere, y a pesar de las circunstancias, la Confederación no renunciará en ningún momento a continuar con su labor, crucial para el colectivo. Como asegura su presidenta, Carmen Laucirica, “defenderemos el acceso de las familias con personas con discapacidad intelectual más vulnerables a los servicios públicos de calidad. Tenemos el reto de luchar por sus derechos desde nuestras organizaciones. Y lo hacemos porque los servicios sociales públicos son el último recurso para cientos de miles de familias golpeadas por las subidas de la cesta de la compra, de la luz o de la calefacción. Estas son las que más nos preocupan, porque son quienes sufren más el impacto de la crisis”.
– A día de hoy, 98 asociaciones dedicadas a la discapacidad y a la dependencia ya son miembros de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?