Lung Cancer Europe (LuCE) ha presentado, en un evento presidido por el Sr. Vytenis Povilas Andriukaitis (Miembro del Parlamento Europeo y del MEP Lung Health Group), su 9º Informe sobre Cáncer de Pulmón titulado “Conocimiento y toma de decisiones entre las personas afectadas de cáncer de pulmón en Europa“. Este documento ha puesto de relieve la falta de información y participación de las personas afectadas de cáncer de pulmón en la toma de decisiones sobre su enfermedad.
El informe de LuCE es una iniciativa anual liderada por esta organización europea con el propósito de aumentar la concienciación sobre los principales retos que afrontan las personas afectadas por esta enfermedad. Este informe es un análisis de investigación descriptivo que explora el nivel de información, conocimiento y participación en la toma de decisiones entre las personas afectadas de cáncer de pulmón en Europa. Los datos fueron recabados mediante una encuesta online autocompletada (activa desde el 24 de mayo hasta el 7 de julio de 2024). Esta encuesta fue respondida por 2.040 participantes (1.432 personas con cáncer de pulmón y 608 cuidadoras) de 34 países europeos.
Este estudio revela una preocupante falta de conocimiento sobre el cáncer de pulmón entre las personas afectadas por esta enfermedad. Este informe destaca la necesidad urgente de aumentar la concienciación social en torno al cáncer de pulmón y de capacitar a las personas para que puedan participar activamente en la toma de decisiones sobre su enfermedad. Así lo indicó Anne-Maria Baird, presidenta de LuCE. “La toma de decisiones compartida es un aspecto fundamental para lograr una atención sanitaria centrada en la persona. Sin embargo, los datos de este informe revelan que muchas personas afectadas de cáncer de pulmón no están implicadas en las decisiones sobre el proceso de la enfermedad. La implementación de las decisiones compartidas debe ser un indicador fundamental que garantice una atención de calidad para todas las personas”, explicó.
Principales hallazgos
Conocimiento sobre el cáncer de pulmón
- Antes del diagnóstico, el 55,3% de personas con cáncer de pulmón no sabía o apenas sabía que estaban en riesgo de desarrollar la enfermedad.
- Mientras que el 82,8% reconoció el tabaquismo como un factor de riesgo, solo una minoría estaba al tanto de otros como el radón (17,1%), la radiación (21,5%), el asbesto (34,8%) y la contaminación (38,5%).
- El 65,1% reconoció haberse demorado en acudir a su equipo médico tras experimentar síntomas y 4 de cada 10 atribuyó este retraso a no reconocer los síntomas (46,5%) o a atribuirlos erróneamente a otras afecciones (42,9%).
- Una cuarta parte de quienes respondieron la encuesta admitió tener poco conocimiento sobre la enfermedad (28,8%), no estar al tanto de los biomarcadores (22,2%) o no comprender completamente el pronóstico (24,2%).
Acceso a la información
- La mayoría de las personas participantes (89,2%) consideró que la información era muy importante. Sin embargo, el 40,2% no recibió suficiente información y el 28,9% afirmó que no comprendió completamente la información recibida.
- Un tercio no valoró positivamente la comunicación con su equipo médico, mencionando como principales dificultades el tiempo limitado en consulta (50,9%) y las insuficientes habilidades de comunicación (41,7%).
- 9 de cada 10 buscaron información de salud fuera del sistema sanitario, pero 1 de cada 4 no encontró la información que buscaba o la consideró inexacta.
Toma de decisiones compartida
- Casi todas las personas encuestadas afirmaron que sus opiniones deberían ser consideradas en el proceso de toma de decisiones (98,0% de pacientes y 91,5% de cuidadores).
- Sin embargo, solo el 49,3% afirmó estar muy implicado en este proceso y solo el 55,9% sintió que su opinión era considerada.
- Como consecuencia, únicamente el 59,5% valoró positivamente su participación en la toma de decisiones.
- La complejidad de la información (49,2%) fue señalada como el principal obstáculo para una participación significativa en la toma de decisiones.
Llamada a la acción
- Aumentar la concienciación social sobre el cáncer de pulmón y la detección temprana, e invertir esfuerzos en reducción de riesgos.
- Facilitar la toma de decisiones compartida para ayudar a mejorar la calidad de vida