Hoy domingo, 2 de abril, se celebra el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, una efeméride instituida e impulsada desde 2007 por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con el objetivo de informar a la sociedad sobre la realidad, necesidades y derechos de los niños y adultos con trastornos del espectro autista (TEA).

Como recoge la resolución 62/139 de la ONU, en la que designó este Día Mundial, “el autismo es una discapacidad permanente del desarrollo que se manifiesta en los tres primeros años de edad; la tasa del autismo en todas las regiones del mundo es alta y tiene un terrible impacto en los niños, sus familias, las comunidades y la sociedad”.

Esta edición de la efeméride se celebra bajo el lema ‘Por un mundo neuroinclusivo para todos’, a la sazón título del encuentro virtual programado por la ONU para las 16:00 horas de este domingo y con el que la Organización busca, además de promover la aceptación, apoyo, inclusión y defensa de los derechos de las personas con TEA, destacar las contribuciones que hace el colectivo al mundo en diversos ámbitos, caso del hogar, el trabajo, las artes y la elaboración de políticas.

En los últimos años se han logrado significativos avances en la concienciación y aceptación del autismo. Además, los profesionales sanitarios, investigadores y académicos de numerosos países ya han incorporado a su trabajo el paradigma de la neurodiversidad acuñado por Judy Singer a finales de los años 90. El resultado es que el mundo ha abandonado la idea de curar o convertir a las personas con TEA para centrarse en su aceptación y apoyo, lo que permite al colectivo reivindicar su dignidad, autoestima y plena inclusión como miembros valiosos de sus familias y sociedades.

Sin embargo, alerta Naciones Unidas, “las personas con autismo siguen enfrentándose a la discriminación y a otros retos. Como todos los grupos, poseen una amplia gama de talentos y retos que a menudo no son reconocidos por el mundo en el que nacen. Además, los niveles de concienciación y aceptación varían drásticamente de un país a otro. También debemos reconocer que estas personas son especialmente vulnerables a los grandes trastornos de las rutinas y la vida cotidiana, como pandemias, guerras y desastres naturales”.

Una situación que vulnera las libertades fundamentales del colectivo, legalmente amparadas tanto por la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de las Naciones Unidas como por la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

En consecuencia, indica António Guterres, secretario general de la Organización, en su mensaje por la efeméride, “debemos hacer más, promoviendo la educación inclusiva, la igualdad de oportunidades en el empleo, la libre determinación y un entorno en que se respete a todas las personas. Así, también reconoceremos el papel de la familia, los cuidadores y las redes de apoyo de las personas con autismo. Hoy y todos los días, reconozcamos todo lo que aportan activamente las personas con autismo a la sociedad y trabajemos con ellas para construir un mundo inclusivo y accesible para todos.

Conmemoración en España

En nuestro país, la efeméride también se celebra bajo el lema ‘Autismo. Llamémoslo por su nombre’, a la sazón título de la campaña puesta en marcha por la Confederación Autismo España para visibilizar y concienciar sobre tres aspectos esenciales que contribuirán a promover la participación e igualdad de oportunidades de las cerca de 450.000 personas con autismo que residen en España y sus familias: la variabilidad dentro del TEA; la singularidad y especificidad del autismo, y el sentido de pertenencia del colectivo.

Como recoge la Confederación en su Manifiesto por el Día Mundial en relación a la variabilidad, “no hay dos personas con autismo iguales. Cada una tiene sus propios intereses, capacidades y necesidades, aunque compartan un mismo diagnóstico. Es fundamental comprender el autismo como un amplio espectro, donde cada persona puede situarse en una situación muy distinta, aunque tengan muchos puntos comunes”.

Asimismo, únicamente desde el conocimiento de la singularidad y especificidad del autismo se podrán comprender las necesidades de las personas con TEA y los apoyos que precisan para mejorar su calidad de vida y promover su participación social en igualdad de condiciones. 

Finalmente, y en el caso del sentido de pertenencia, “queremos poner en valor –apunta Autismo España– los derechos de las personas con autismo y sus familias que, como las demás, deben sentirse orgullosas de sí mismas y defender su derecho a ser respetadas y escuchadas. Porque son valiosas, pueden tomar sus propias decisiones, aunque para ello puedan necesitar apoyo, y no pueden ser excluidas, marginadas o agredidas por su condición”. 

Para firmar el Manifiesto y contribuir a promover el conocimiento sobre el autismo y la tolerancia y respeto hacia el colectivo pincha aquí.

Además de la puesta en marcha de una nueva edición de la campaña ‘Light It Up Blue’, que este domingo busca alcanzar los 500 edificios y monumentos iluminados de color azul por todo el país, Autismo España solicita la colaboración de la ciudadanía en su visibilización a través de su campaña ‘Autismo. Llamémoslo por su nombre’.

Para participar en la iniciativa haz el símbolo del infinito con las manos o descarga este recortable, hazle una foto y compártela en tus perfiles en redes sociales con los hashtags #LlamémosloPorSuNombre y #DíaMundialAutismo.

Para más información sobre el Día Mundial pincha aquí.

– A día de hoy, 15 asociaciones dedicadas a los trastornos del espectro autista (TEA) son ya miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?