Uno de cada tres conductores con cefalea considera que esta enfermedad supone un riesgo para la seguridad vial. De hecho, la mitad de los pacientes considera que las cefaleas pueden llegar a ser un factor peligroso a la hora de ponerse al volante.

Así lo muestra el informe ‘Cefaleas, migraña y riesgo para la conducción de vehículos’, elaborado por la Asociación Española de Pacientes con Cefalea (AEPAC), miembro de Somos Pacientes, y el Grupo de Neurología de la Asociación Española de Especialistas en Medicina del Trabajo (AEEMT), con la colaboración con el Instituto de Seguridad Vial de Fundación Mapfre.

En torno a un 15% de la población, muy especialmente las mujeres, sufren cefaleas –sobre todo migrañas– con una frecuencia promedio de 3 a 6 veces por mes. Y las cefaleas, dado que cursan con, entre otros síntomas frecuentes, alteraciones de la visión, falta de movilidad en las extremidades, dificultad para la concentración y lentitud de reflejos, pueden condicionar negativamente la destreza al volante de los pacientes.

Conducción comprometida

El informe, realizado a partir de las encuestas realizadas a cerca de 350 pacientes, tuvo por objetivo conocer las implicaciones que, sobre la conducción, tienen tanto las cefaleas como los medicamentos para su tratamiento.

Los resultados muestran que, ante una cefalea, cerca de la mitad de los conductores se ven abocados a buscar una zona de descanso o un área de servicio en la que parar hasta que los síntomas disminuyen. Asimismo, hasta el 20% de los conductores reconoce haber tenido que llamar a un familiar o un amigo en busca de ayuda, y el 12,5% se ha visto obligado a detener su vehículo en el arcén de manera temporal hasta la desaparición de los síntomas.

Además, más del 40% de los encuestados ha sufrido disminución de la movilidad o falta de sensibilidad en las extremidades, y un 33% ha padecido problemas de visión.

Evitar posturas forzadas

Por lo que respecta a la medicación, el informe propone medidas preventivas para reducir el riesgo, caso de evitar la automedicación o seguir las instrucciones del médico y comunicarle cualquier efecto secundario medicamentoso.

También aconseja a los pacientes sentarse lo más cómodamente posible y colocar adecuadamente el respaldo del sillón, la altura del asiento, el reposacabezas, los retrovisores y la distancia al volante y a los pedales. «Todas estas pautas contribuirán a evitar posturas forzadas, movimientos repetitivos y sobreesfuerzos musculares de la columna vertebral que pueden desencadenar o potenciar las cefaleas», concluye el documento.

– A día de hoy, la Asociación Española de Pacientes con Cefalea (AEPAC)  y la Asociación Cefalea en Racimos Ayuda (ACRA), asociaciones de pacientes dedicadas a la cefalea, son ya miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?