Como explica Diana Gutiérrez, responsable del Área de Comunicación de FEAFES CyL, “es muy complicado informar sobre las enfermedades mentales porque tiene una gran trascendencia detrás. Y si no lo hacemos de forma adecuada, estamos poniendo en riesgo a los familiares”.
Información negativa
La necesidad de la inmediatez a la hora de transmitir la información hace que los periodistas “nos dejemos arrastrar por campañas y colectivos”, reconoce Diana Gutiérrez, quien sin embargo puntualiza que, “cuando hay una muerte, los medios no deberían titular con una patología”. Así, debe recomendarse la no identificación de la enfermedad con el paciente afectado por el trastorno. “Por ejemplo, hablaremos de ‘persona con esquizofrenia’ en vez de ‘esquizofrénico’”, indica la responsable del Área de Comunicación de FEAFES CyL.
No en vano, “al colectivo le duele cómo se utilizan diferentes vocablos y términos para referirse a ellos, con expresiones negativas en los medios de comunicación”, incide Diana Gutiérrez, quien recuerda que los periodistas “somos generadores de opinión y de conciencia. Mucha gente vive de lo que contamos, y si informamos mal de enfermedades y salud mental, se hace mucho daño”.
A este respecto, FEAFES CyL identifica tres causas que explican este tratamiento informativo: el desconocimiento de la realidad del colectivo –tanto pacientes y familiares– por los periodistas no especializados; la falta de tiempo, lo que dificulta enormemente, cuando no imposibilita, que los periodistas recurran a fuentes bien informadas; y la ausencia de un portavoz cualificado y de fácil acceso por parte de las asociaciones de familiares (AFA), “que impide a los redactores contar de manera más cercana y natural los temas de salud mental”, concluye la Federación.
– A día de hoy, 312 asociaciones de pacientes dedicadas a los trastornos mentales son ya miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?