La Federación Nacional de Enfermos y Trasplantados Hepáticos (FNETH), miembro de Somos Pacientes, ha puesto en marcha en el Metro de Madrid la campaña ‘Que algo no se vea no significa que no exista’ para visibilizar la discapacidad orgánica y concienciar a la sociedad sobre la realidad de las personas que la presentan.
La discapacidad orgánica es el resultado de la pérdida de funcionalidad en sistemas corporales relacionados con órganos o procesos fisiológicos que, por lo general, se producen por el desarrollo de condiciones de salud crónicas.
Un tipo de discapacidad que, explica la FNETH, “en la mayoría de los casos no se ve a simple vista, por lo que se trata de un tipo de discapacidad invisibilizada, desconocida y que a menudo permanece oculta. Quienes la tienen se encuentran con numerosas dificultades en su día a día, derivadas fundamentalmente de la falta de reconocimiento y de visibilidad”.
La campaña, enmarcada en la iniciativa ‘Conectados contigo’ de la Comunidad de Madrid, permanecerá activa en la línea 7 del Metro hasta el domingo 7 de enero para sensibilizar sobre algunos de los signos y síntomas comunes de la discapacidad orgánica, caso entre otros de la fatiga, el dolor, el cansancio y las dificultades en la movilidad.
Una sintomatología a la que se suman otro tipo de limitaciones y barreras sociales como las dificultades y obstáculos laborales, y/o socioeconómicos, la incomprensión o el escaso reconocimiento. El resultado es que las personas con este tipo de discapacidad no se sienten con la misma legitimidad para poder hacer uso de determinadas cuestiones asociadas a la discapacidad, como puede ser ocupar un asiento reservado o tomarse los permisos laborales pertinentes para acudir a la consulta médica.
Por ello, y como consecuencia fundamentalmente de esta falta de visibilidad, la FNETH considera de vital importancia la inclusión del Símbolo Internacional de la Discapacidad Orgánica en transportes públicos y otras dependencias y edificios públicos, para así darle reconocimiento y visibilidad y garantizar sus derechos a las personas que la presentan.
Como apunta la Federación, “para el colectivo de pacientes del hígado y/o trasplantados la discapacidad orgánica es algo habitual. Las personas trasplantadas suelen tener discapacidad orgánica debido a los efectos secundarios de la medicación inmunosupresora que necesitan tomar de por vida para evitar el rechazo del órgano; y quienes tienen una patología hepática crónica también pueden tenerla a causa de su enfermedad y sus síntomas”.
Tal es así que la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (COCEMFE) y su movimiento asociativo, al que pertenece la FNETH, llevan muchos años reclamando el reconocimiento social y oficial de la discapacidad orgánica con objeto de conseguir una sociedad realmente inclusiva y sin distinciones.
– A día de hoy, 5 asociaciones de pacientes dedicadas a los trastornos del hígado y 98 asociaciones dedicadas a la discapacidad y a la dependencia ya son miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?