En palabras de Elvira Jiménez, óptico-optometrista de Alain Afflelou, «el uso excesivo de videojuegos por los niños puede llegar a provocar una variación significativa de la agudeza visual, pudiendo llegar a desencadenar miopías en la edad adulta, problemas de sequedad ocular o hiperemia conjuntival«.
Por ello, la especialista recomienda que los niños utilicen las consolas y aparatos electrónicos «un máximo de 30 a 40 minutos, requiriéndose un descanso cada 20 minutos en los casos en los que se utilicen durante más tiempo».Problemas visuales
Las personas que juegan con los aparatos electrónicos –ya sea una consola, un teléfono móvil, una tableta o un ordenador– deben tener una “buena agudeza visual, visión binocular, buena motilidad ocular para seguir el movimiento de los objetos, amplio campo visual y buena coordinación ojo-mano, entre otras cualidades”, explica Elvira Jiménez. Así, y en caso de que «falle alguna de estas habilidades, comenzaremos a tener problemas visuales como visión borrosa y/o doble, cefaleas, dolor ocular, enrojecimiento e irritación, ojo seco o lagrimeo».
Según los estudios, el uso de dispositivos electrónicos no solo afecta a la visión, sino también a la interacción con el medioambiente, la iluminación, los reflejos y la fatiga del sistema nervioso. Por otra parte, los trabajos evaluados también también resalta los aspectos positivos de los videojuegos, caso de la mejora de la capacidad de concentración, de los reflejos y de la memoria visual.
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