Como explica el CERMI, “para acabar con este alto número de personas que, aun teniendo derecho a ello, no reciben prestaciones ni servicios, exigimos una dotación adicional extraordinaria para este año de 1.000 millones de euros, cantidad que se agregaría a la habitual y que debería consignarse en la Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2018”.
Fracaso del Sistema
Con esta inversión suplementaria de 1.000 millones de euros, a la que se deberían sumar las inversiones de cada Administración autonómica –en la misma medida que haya crecido la del Estado–, podría ponerse a cero el contador de la dependencia en este 2018, logrando que toda persona con prestación reconocida la recibiera de modo real, sin esperas de meses y años como sucede a día de hoy.
Como informa el CERMI, “tener reconocido un derecho y que no se traduzca en nada tangible para la persona en situación de dependencia es el mayor fracaso del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia y una burla hiriente a la Ley que ha cumplido más de 10 años desde su aprobación y entrada en vigor”.
Así, “esta aportación presupuestaria extraordinaria debería formar parte de un pacto de Estado más amplio y ambicioso, suscrito por todas las fuerzas políticas, las administraciones competentes, los agentes y los movimientos sociales, para consolidación y revitalización de un dispositivo de protección social en profunda crisis’, concluye el Comité.
– A día de hoy, 92 asociaciones de pacientes dedicadas a la discapacidad y a la dependencia son ya miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?