La obesidad es un factor de riesgo muy importante para el desarrollo de numerosas enfermedades potencialmente letales, caso de las cardiovasculares y de la diabetes tipo 2. Un aspecto a tener muy en cuenta dado que, según muestra el ‘Atlas Mundial de la Obesidad 2022’, publicado por la Federación Mundial de Obesidad (WOF) con motivo de la celebración del Día Mundial de la Obesidad, en el año 2030 una de cada cinco mujeres y uno de cada siete varones del planeta, así como el 13% de la población infantil global, serán obesos. En total, 1.000 millones de personas.
Como alerta la Federación Internacional de Diabetes (IDF), “la obesidad, que en 2030 se espera que duplique la tasa global de 2010, supone un importante factor de riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Y si bien en algunas partes de Europa y América del Norte las tasas de obesidad, aun elevadas, se están estabilizando, en países con ingresos bajos y medianos están creciendo rápidamente, añadiendo presión en muchas naciones que también luchan contra la desnutrición”.
1.000 millones de obesos
A día de hoy conviven en todo el planeta cerca de 800 millones de personas con obesidad, enfermedad cuya incidencia en la población infantil se estima crecerá hasta un 60% en solo una década para un total de 250 millones de niños obesos ya en 2030.
En este contexto, incide la IDF, “resulta vital la prevención de la obesidad, así como su intervención y tratamiento precoz, por medio de las políticas gubernamentales. Debe garantizarse que los servicios sanitarios no se vean saturados y sean capaces de ofrecer atención a aquellos que lo necesitan”.
De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) se ha marcado como objetivo detener el crecimiento de las tasas de obesidad tanto en los adultos como en los menores ya para el año 2025. Sin embargo, y a la luz de los datos del Atlas de la WOF, en el que se incluye un nuevo índice de clasificación de los países en función de sus herramientas para esta lucha, incluidos los sistemas sanitarios, parece que está fracasando rotundamente en su cometido.
Es más; las nuevas evidencias del Atlas son consistentes con las recogidas en la décima edición del Atlas de la Diabetes de la IDF, en el que se muestra un crecimiento global continuo de la incidencia y prevalencia de la diabetes tipo 2, en la que la obesidad es un factor determinante. Tal es así que, como indica su presidente, el profesor Andrew Boulton, “los países deben priorizar sus acciones en la obesidad y la diabetes tipo dos para poder cumplir con el objetivo de reducir la mortalidad prematura por las enfermedades no transmisibles para el año 2030”.
En la misma línea, concluye la Federación Española de Diabetes (FEDE), miembro de Somos Pacientes, “la lucha contra la obesidad y sus factores de riesgo es algo para lo que los servicios sanitarios deben estar preparados. Cuanto más precoz sea el diagnóstico y antes se tomen medidas, antes se acabará con la problemática y se evitarán complicaciones como puede ser la diabetes. Con una atención efectiva por parte de los profesionales sanitarios se conseguirá controlar el peso y las enfermedades relacionadas”.
– A día de hoy 95 asociaciones de pacientes dedicadas a la diabetes son ya miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?