Todos hemos sido, somos o seremos pacientes. Francisco Luzón (El Cañavate, Cuenca, 1948) fue hasta su jubilación en 2012 uno de los grandes profesionales españoles de la banca. Gestionó la fusión de las seis entidades que dieron origen a Argentaria y también fue, entre otras muchas cosas, actor principal de la expansión internacional del Banco Santander. Hace cuatro años se retiró con una pensión de 32 millones de euros dispuesto a disfrutar de la vida. Solo 10 meses después comenzó a sufrir los primeros síntomas de la esclerosis lateral amiotrófica (ELA). «Ser paciente de ELA me ha confirmado que la esencia de la vida es tirar hacia delante», afirma en la entrevista de Cristina Delgado que publica el diario ‘El País’.
El diagnóstico y los problemas de salud llevaron a Luzón a abandonar la vida pública. Pero ahora tiene un nuevo objetivo: sacar adelante una fundación contra la enfermedad. Para empezar, destaca en la entrevista de ‘El País’, la ELA necesita visibilidad. «Cuando fui profesional de la banca siempre trabajé y me esforcé por cambiar, transformar y desarrollar los proyectos profesionales en los que me involucré. Ahora, que he conocido la situación y la realidad invisible de una enfermedad tan cruel como la ELA quiero comprometerme para que las cosas cambien para pacientes y familiares«.
En otra entrevista a Luzón, publicada por Pedro Simón en ‘El Mundo’, explica de esta forma por qué ha decidido dar un paso al frente: «Para dar a conocer qué es la ELA y el inmenso dolor por el que pasan sus pacientes, porque creo que tengo el deber de contribuir a que la sociedad conozca esta enfermedad y sea consciente de que hay que avanzar en su tratamiento y cura. No por mí, sino por los 4.000 enfermos que en España la padecen y no tienen la asistencia ni apoyos necesarios. Quiero contribuir a que los enfermos puedan vivir con calidad y dignidad».
Su trabajo para poner en marcha la fundación comenzó hace ocho meses: el economista ya ha visitado grandes hospitales, se ha reunido con los mayores expertos en ELA del país, con seis asociaciones y con 20 fundaciones dedicadas a la medicina y la ciencia. Experiencia no le falta. En su ‘vida anterior’ fue promotor de proyectos tan ambiciosos como Universia, asentados en la colaboración público-privada.
Cuando Pedro Simón le pregunta en ‘El Mundo’ a qué se agarra para seguir adelante, Luzón contesta: «A lo que siempre me condujo en mi vida: poner frente al pesimismo de la inteligencia el optimismo de la voluntad. Ser consciente de que la vida merece ser vivida con dignidad. Y entender que la vida consiste en tener algo que hacer, alguien a quien amar y alguna cosa que esperar… Mi gran punto de apoyo es mi mujer. Mi familia apoya la razón de ser de mi vida ahora, el ayudar a mis compañeros de viaje social: los enfermos de ELA».
– A día de hoy, 7 asociaciones de pacientes dedicadas a la esclerosis lateral amiotrófica ya son miembros de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?