En los últimos días ha tenido lugar la sexta edición del encuentro ‘FarmaImpulso IMID Laboratorio de Ideas’, que ha reunido a unos 140 expertos en farmacia hospitalaria. En esta ocasión ha sido tratada con especial relevancia la atención temprana y multidisciplinar de las enfermedades inflamatorias inmunomediadas (IMID), como la psoriasis, sobre todo con el objetivo de reducir el impacto emocional que pueden tener en la salud mental de los pacientes.

Psoriasis

El evento ha sido organizado por Johnson & Johnson Innovative Medicine y avalado por la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), y ha servido para poner en valor la importancia de tener un diagnóstico y abordaje tempranos. “Ambos aspectos son cruciales para mejorar la calidad de vida de los pacientes y modificar el curso de la enfermedad, ya que podemos realizar un control más efectivo de los síntomas reduciendo el impacto sobre su calidad de vida”, ha puntualizado Joaquín Borrás Blasco, jefe del Servicio de Farmacia del Hospital de Sagunto (Valencia).

Según sus datos, la psoriasis afecta un 2,3% de la población española, unas 870.000 personas, y puede implicar comorbilidades y alteraciones en la salud física, mental y emocional de los pacientes. Por eso ha recomendado “un modelo de atención integrado que incorpore a los distintos profesionales involucrados en el diagnóstico, principalmente dermatología, reumatología, gastroenterología y farmacia hospitalaria”. Y que implique de forma directa a los pacientes, algo que repercute en un mejor autocuidado y adherencia.

Evitar complicaciones

En el evento también ha participado Esther Ramírez, especialista del Servicio de Farmacia del Hospital Universitario de La Princesa (Madrid), que ha coincidido en muchos de estos aspectos. En su opinión, en el abordaje de la psoriasis una actuación temprana no sólo puede evitar complicaciones serias y permitir un mejor manejo de la enfermedad, sino también contribuir a una mejor calidad de la vida de los pacientes.

Sobre todo aportaría una mayor seguridad, fomentando con ello unas relaciones sociales, laborales y familiares mucho más satisfactorias. “Todo ello aumenta su autoestima y su estado de ánimo”, ha confirmado Ramírez. Por otra parte, la especialista ha planteado otros retos relativos a la salud emocional de estos enfermos, entre los que están la reducción de los retrasos en el diagnóstico y el acceso temprano del paciente a un especialista.

También garantizar la equidad en el acceso a los tratamientos en todas las comunidades autónomas y la puesta en marcha de fórmulas de atención integral que sirvan para afrontar esas comorbilidades habituales en las enfermedades inflamatorias inmunomediadas (diabetes, hipertensión arterial, dislipemias, etc.). Y combinar las necesidades puramente sanitarias teniendo en cuenta también las sociales: necesidades familiares y laborales que impactan en su bienestar emocional.

La utilidad de la inteligencia artificial

Otro de los aspectos que se abordó en el encuentro fue la aplicación de la inteligencia artificial (IA) y de los datos para impulsar la innovación y el desarrollo de nuevas terapias para este tipo de enfermedades. Emilio Monte, especialista del Servicio de Farmacia del Hospital Universitario y Politécnico La Fe (Valencia), esta tecnología puede ser muy útil en el diagnóstico (identificación, clasificación y segmentación de lesiones).

También en el pronóstico (en función del perfil individual de cada paciente); el tratamiento (predicción de su eficacia, de los fármacos idóneos en función de cada caso); la gestión (salud electrónica, medicina preventiva); y la investigación, teniendo en cuenta que cada vez se realizan más estudios en vida real basados en ‘machine learning’.

Desde el punto de vista de Monte, los modelos predictivos son eficaces a la hora de identificar de forma temprana pacientes con un mal control de su enfermedad o con problemas relacionados con su tratamiento. “Y para la industria farmacéutica están sirviendo para acortar los tiempos en el descubrimiento de nuevos fármacos”, ha asegurado.