El informe, elaborado a partir de la encuesta realizada a más de 16.000 trabajadores de todo el mundo, revela que el estrés y la presión soportada por los españoles en el trabajo ha crecido significativamente en los últimos meses por, entre otros factores, la política de recortes llevada a cabo por el Gobierno, la reciente subida del IVA o la agilización de los procesos de despido.
Reducir el estrés
Con objeto de reducir la sensación de estrés, el 72% de los consultados alude a la conveniencia de mejorar la conciliación entre las vidas familiar y laboral, mientras que un 64% considera que una mayor flexibilidad laboral también favorecería este supuesto.
Por lo que respecta al tipo de trabajo, los trabajadores de las pequeñas empresas –un 42% de los encuestados– tienen un mayor riesgo de sufrir estrés, dado que mantienen una relación más directa con sus clientes. En el caso de las grandes compañías, los principales desencadenantes del estrés son los problemas relacionados con la gestión y los cambios estructurales.
Como concluye, Olivier de Lavalette, director de Regus en Europa del Sur, «sin ninguna duda, los trabajadores estresados ni están contentos ni gozan de buena salud«. En consecuencia, y para que una empresa logre que sus empleados disfruten de una vida más gratificante, «no pueden olvidarse de analizar y abordar los distintos niveles de estrés que pueden sufrir en cada momento».
