Bajo el lema «La salud ocular y el acceso igualitario a la atención ocular», este jueves 11 de octubre se celebra el Día Mundial de la Visión, una efeméride instituida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que se desarrolla cada segundo jueves del mes de octubre con el objetivo de centrar la atención en la ceguera, la discapacidad visual y la rehabilitación de los discapacitados visuales.
En este contexto, y si bien la mayoría de las afecciones oculares que padece la población general –principalmente, las personas mayores de 50 años– pueden tratarse con facilidad, la OMS quiere alertar en este día sobre la falta de equidad en la atención ocular que padecen muchos pacientes en distintas partes del mundo.
Como recuerda el Consejo General de Colegios de Ópticos-Optometristas (CGCOO), «las revisiones oculares periódicas pueden prevenir hasta un 50% de los casos de pérdida visual». Por esta razón, el Consejo recomienda a los ciudadanos que acudan al óptico «cuando menos una vez al año y con independencia de la edad del paciente, para así detectar precozmente aquellas afecciones que, como el glaucoma, no presentan síntomas en sus estadios iniciales hasta que el daño ocular resulta irreversible».
Diabetes y HTA
La revisión ocular anual es especialmente importante en el caso de los niños y de los mayores de 45 años. Y, sobre todo, en los pacientes que presentan un mayor riesgo de padecer problemas visuales, caso de los afectados por la diabetes o la hipertensión arterial (HTA). No en vano, y como recuerda Juan Carlos Martínez Moral, presidente del CGCOO, «la visita anual a los expertos se presenta como el principal aliado para conservar el sentido que la mayoría de la población considera como el más importante».
Es más; la revisión ocular también posibilita la identificación de otras enfermedades que «tienen su manifestación en los ojos, como en el caso de la hipertensión, que puede manifestarse en los vasos sanguíneos de la parte posterior del ojo», explica Martínez Moral.