Las enfermedades cardiovasculares constituyen, tras la lumbalgia y la depresión, la tercera causa de baja laboral en nuestro país. Concretamente, son responsables de cerca de 23.000 bajas anuales en las empresas españolas, cifra que se traduce en unas pérdidas económicas que, cada año, rondan los 1.200 millones de euros.

Por ello, y con el objetivo de paliar esta situación, Mutua Navarra ha presentado la guía ‘Potenciar estilos de vida cardiosaludables desde la empresa’ manual que, editado en colaboración con la Fundación Española del Corazón (FEC), la Confederación de Empresarios de Navarra (CEN), Prevención Navarra y el Instituto Navarro de Salud Laboral Foral (INSL), incide en la importancia de promover conductas laborales dirigidas para disminuir el riesgo de desarrollo de enfermedades cardiovasculares.

Como ha recordado Jerónimo Calvo,  director de Información y Atención al Mutualista en Mutua Navarra, “el 17% de las bajas anuales en España están relacionadas con hábitos de vida modificables, como el consumo de tabaco o alcohol, la inactividad física, la hipertensión arterial, o la diabetes”.

Prevalencia de las ECV

En este contexto, debe tenerse en cuenta la significativa prevalencia de las enfermedades cardiovasculares en la población general y, por ende, en el entorno laboral.

Así, y a modo de ejemplo, en el caso de la Comunidad Foral, como ha destacado Aurelio Barricarte, jefe del Servicio de Epidemiología, Prevención y Promoción de la Salud del INSL, “solo una de cada ocho personas mayores de 35 años no presenta ningún factor de riesgo cardiovascular y, según la Cartera de Servicios de Atención Primaria en 2012, Navarra cuenta con 101.000 hipertensos, más de 16.500 personas con cardiopatía isquémica, 13.900 con enfermedad cerebrovascular y 5.900 con insuficiencia cardiaca; es más; el 45% de la población navarra tiene hipertensión y el 23% fuma, con un 19% de mujeres y un 28% de varones”.

En consecuencia, la guía, cuarto volumen de la colección ‘Recomendaciones para una empresa saludable’, muestra la manera para adquirir hábitos más saludables y especifica los fundamentos para una intervención efectiva desde las propias empresas.

En palabras de Javier Martinena, secretario general de la CEN, “el apoyo a actividades de promoción de la salud de los trabajadores lleva implícito el ejercicio de la responsabilidad social empresarial; se trata de ir más allá de lo que hasta ahora han representado los esquemas habituales de la salud laboral, incluyendo en el ámbito de actuación de la empresa el cuidado de la salud en general como un elemento más de la misma”.

– A día de hoy, 26 asociaciones de pacientes dedicadas a las enfermedades cardio y cerebrovasculares son ya miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?