Desde el inicio de la pandemia y ante la proliferación de iniciativas particulares, que han ido surgiendo, para elaborar mascarillas transparentes, que faciliten la lectura labial a las personas con sordera, FIAPAS ha estado en contacto directo con los diferentes ministerios implicados en la materia (Ministerio de Sanidad, Ministerio de Industria, Comercio y Turismo y Ministerio de Consumo) con objeto de conocer si estas iniciativas, que surgían con la mejor voluntad, cumplían o no las condiciones de protección, seguridad e higiene necesarias para evitar cualquier riesgo asociado a su uso.
Con la información recibida por parte de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) y del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, FIAPAS elaboró y publicó el pasado 4 de mayo un documento síntesis al respecto que puede consultarse en el siguiente enlace: https://bit.ly/sintesis-mascarillas
Actualmente son varias las empresas que están también poniendo en el mercado este tipo de mascarillas transparentes, si bien todavía no existe una homologación y/o estandarización de los requisitos que específicamente este tipo de mascarillas, por su singularidad y diseño, deberían cumplir para asegurar las condiciones de seguridad y prevención de contagios, requisitos necesarios en todo caso, pero indispensables para permitir su uso en el ámbito laboral, máxime si se trata de entornos de intervención clínica, educativa, etc.
Por ello, FIAPAS reitera su petición de liderazgo en esta materia a los Ministerios de Sanidad y de Industria para que, con independencia del cumplimiento de las normas fijadas para los materiales, se pueda asegurar que en la confección y resultado final del producto se cumplen los requisitos de seguridad y efectividad precisos.
Confiamos en que las personas sordas y sus familias, los profesionales que las atienden y la sociedad en general, obtengan una pronta respuesta. En este momento, una respuesta resolutiva respecto a este tipo de producto (mascarillas transparentes) es urgente, pero debemos señalar que, superada esta urgencia, seguirán siendo imprescindibles en cualquier contexto comunicativo donde su uso sea necesario y/o obligatorio.