La hipertensión pulmonar es una condición provocada por diferentes enfermedades caracterizada por el desarrollo de cambios moleculares y anatómicos en la circulación sanguínea pulmonar, que derivan en un aumento anormal de la presión en la arteria pulmonar (> 20 mmHg). Afecta aproximadamente al 1% de la población mundial (un valor que puede llegar hasta el 10% en personas mayores de 65 años) y cerca del 80% de las personas que viven con hipertensión pulmonar reside en países en vías de desarrollo. La HP se clasifica en cinco grupos diferentes, entre las causas más frecuentes, destacan las enfermedades cardíacas del lado izquierdo y pulmonares.

El desarrollo de la HP se asocia casi invariablemente al empeoramiento de síntomas como disnea, fatiga y tos, entre otros, y al aumento de la mortalidad, independientemente de la patología de base. A pesar de que no existan curas para algunos tipos de hipertensión pulmonar, se han dado pasos importantes en términos de conocimiento, terapia y pronóstico que han cambiado la perspectiva sobre la enfermedad, por lo que el tratamiento actual puede ayudar a mejorar la calidad de vida de las personas que viven con esta patología.

Frente a este escenario, los expertos coinciden en que es fundamental establecer una serie de prioridades clínicas para mejorar la atención a los pacientes. Entre ellas, destacan: el diagnóstico temprano, el enfoque multidisciplinar y la derivación a centros expertos. Tal y como subraya la neumóloga Claudia Valenzuela, de la Unidad de Enfermedades Pulmonares Intersticiales Difusas del Hospital Universitario La Princesa de Madrid, “el abordaje multidisciplinar nos facilita un diagnóstico correcto y un manejo oportuno de los pacientes. En el caso de la hipertensión pulmonar, también tenemos el reto de referir a estos pacientes a centros expertos para que accedan a un diagnóstico correcto y a un manejo global”.

Asimismo, el profesor Roberto Badagliacca, del Departamento de Ciencias Cardiovasculares y Respiratorias de la Universidad de Roma Sapienza, incide en que actuar pronto marca la diferencia: “La hipertensión pulmonar es una enfermedad degenerativa y cuanto antes se diagnostique, antes se puede iniciar el tratamiento específico”.

Estas prioridades han sido el eje central de la séptima edición del congreso International Meeting on Pulmonary Hypertension Clinical Treatment (IMPAHCT), celebrado en Barcelona y organizado por la compañía farmacéutica Ferrer. Más de 150 expertos en neumología y cardiología de más de 30 países se han dado cita en este encuentro, que se ha consolidado como una referencia internacional en el ámbito de la HP. El congreso ha servido como plataforma para compartir avances terapéuticos, promover la colaboración entre especialistas y trazar líneas comunes de actuación para mejorar el futuro de los pacientes que viven con hipertensión pulmonar.