El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), miembro de Somos Pacientes, ha solicitado al Ministerio de Consumo una normativa urgente para que las grandes cadenas de distribución de productos de primera necesidad –entre otros, alimentación, higiene personal, parafarmacia y limpieza doméstica– estén obligadas a servir a domicilio a las personas mayores o con discapacidad.
Las personas con movilidad reducida presentan mayores dificultades para poder acudir a los supermercados a realizar sus compras, razón por la que suelen optar por realizar sus pedidos a través de Internet o telefónicamente. Sin embargo, y como consecuencia de la pandemia, los servicios de reparto se han visto sobrepasados, resultando muy difícil, cuando no imposible, la utilización de estos recursos que para las personas con movilidad reducida no constituyen una comodidad o un lujo sino una necesidad vital.
Como destaca el CERMI, “la devastación causada por la pandemia ha evidenciado las especiales barreras a las que se enfrentan las personas con discapacidad y las personas mayores en la adquisición de los productos básicos propios del consumidor doméstico, que están a merced de la voluntariedad del comerciante, de su estrategia de entregas, todas con coste agregado, y que no suelen considerar como preferenciales a este tipo de consumidores, pese a su vulnerabilidad objetiva”.
Por todo ello, concluye el Comité, “consideramos que está más que justificado que el Gobierno asuma esta realidad perturbadora, que ahonda la exclusión que viven muchos segmentos de población en nuestro país, y las grandes empresas de distribución tengan que efectuar entregas domiciliarias gratuitas y preferenciales a los consumidores vulnerables”.
– A día de hoy, 95 asociaciones de pacientes dedicadas a la discapacidad y a la dependencia son ya miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?