Distintos estudios han constatado cómo el síndrome de Asperger se asocia con un mayor riesgo de depresión en la edad adulta. Una asociación que podría explicar el mayor índice –hasta nueve veces superior– de pensamientos suicidas que, comparado con la población general, experimentan los adultos con el síndrome. Así sucede, cuando menos, en el Reino Unido, según muestra un estudio llevado a cabo por investigadores del Centro para la Investigación del Autismo (ARC) de la Universidad de Cambridge (Reino Unido) y publicado en la revista The Lancet Psychiatry.
En palabras de la doctora Sarah Cassidy, directora de la investigación, “nuestros resultados constatan los informes puntuales que muestran un incremento de la tasa de ideas suicidas en adultos con síndrome de Asperger, así como que la depresión es un importante factor de riesgo para el suicidio en los adultos con esta condición”.
En consecuencia, “y dado que los adultos con el síndrome suelen tener muchos factores de riesgo para depresión secundaria –caso del aislamiento o exclusión social, y del desempleo–, debe enfatizarse la necesidad de una planificación apropiada de los servicios y apoyos para reducir el riesgo en esta población”, índice la especialista.
Pensamientos suicidas
Para llevar a cabo el estudio, los investigadores evaluaron los resultados de las encuestas cumplimentadas entre los años 2004 y 2013 en el ARC por 374 adultos –256 varones y 118 mujeres– diagnosticados con el síndrome de Asperger.
Los resultados muestran que la tasa de pensamientos suicidas en la población con Asperger se establece en un 66%, muy superior por tanto a la observada en la población general (17%). De hecho, el índice llega incluso a superar el observado en otros estudios con pacientes con trastornos psicóticos (59%).
Es más; las encuestas revelaron no solo que el 66% de los adultos con síndrome de Asperger tenían pensamientos suicidas, sino que hasta un 35% había planeado o intentado suicidarse en algún momento de su vida.
Asperger y depresión
Los pensamientos y comportamientos suicidas fueron significativamente más frecuentes en los adultos con síndrome de Asperger y un historial de depresión.
Concretamente, y de acuerdo con los resultados, los adultos con el síndrome que padecen una depresión tienen hasta cuatro veces más probabilidades de experimentar pensamientos suicidas y hasta el doble de riesgo de planear o intentar un suicidio que aquellos sin antecedentes de depresión.
– ¿Quieres consultar (en inglés) el estudio publicado en la revista ‘The Lancet Psychiatry’?
– A día de hoy, la Asociación Asperger Valencia, la Asociación Sevillana de Síndrome de Asperger (ASSA) y la Fundación Ángel Rivière para la atención integral a las personas con Síndrome de Asperger, asociaciones dedicadas al síndrome de Asperger, son ya miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?