El consumo de una dieta rica en sal eleva significativamente el riesgo de enfermedades cardiovasculares en la población con diabetes tipo 2. Así lo muestra un estudio llevado a cabo por investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Niigata (Japón) y publicado en la revista Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism.

Según el doctor Chika Horikawa, director de la investigación, «nuestros resultados sugieren que el consumo de altas cantidades de sodio en la dieta se asocia con una incidencia elevada de enfermedad cardiovascular en los pacientes con diabetes tipo 2 y que existe un efecto sinérgico entre las cifras de hemoglobina glicosilada (HbA1c) y la toma de sodio en la dieta para el desarrollo de enfermedades CV».

Ocho años y 1.588 pacientes

Para llevar a cabo el estudio, los investigadores evaluaron durante 8 años el riesgo de complicaciones cardiovasculares de un total de 1.588 adultos japoneses que, con edades comprendidas entre los 40 y los 70 años y diagnosticados de diabetes tipo 2, habían cumplimentado una encuesta sobre sus hábitos dietéticos –incluida la ingesta de sodio.

Los resultados muestran que, frente a tomar 2,8 gramos de sal al día, el consumo promedio de 5,9 gramos diarios de sodio duplica el riesgo de desarrollar una enfermedad cardiovascular.

En consecuencia, como concluyen los autores, «reducir el riesgo de desarrollar enfermedad cardiovascular es importante para que las personas que tienen diabetes tipo 2 mejoren el control de azúcar en sangre, además de vigilar su dieta. Y en este sentido, nuestros hallazgos demuestran que la restricción de sal en la dieta podría ayudar a prevenir las complicaciones peligrosas asociadas a la diabetes».

Por el contrario los riesgos de nefropatía, de retinopatía diabética o de mortalidad por cualquier causa no se vieron influidos por la cantidad de sodio en la dieta.

– A día de hoy, 86 asociaciones de pacientes dedicadas a la diabetes ya son miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?