La Asociación Española Contra el Cáncer ha presentado el estudio ‘Necesidades y calidad de vida en supervivientes de cáncer de mama‘, que asegura que una de cada tres de estas mujeres ven como el proceso que han vivido ha afectado negativamente en su día a día después de superar la enfermedad. Tanto en el plano familiar como social, laboral, emocional, físico o sexual, entre otros, las pacientes han visto mermar su calidad de vida.
Así lo ha asegurado Belén Fernández, responsable del Observatorio del Cáncer de la AECC, durante el evento ‘El rosa es más que un color‘, celebrado en el marco del Día Mundial contra el Cáncer de Mama, que se celebra el 19 de octubre. Lo primero que destacó la investigadora es que la preocupación y el miedo son emociones muy comunes entre estas supervivientes, que no disminuyen con el paso del tiempo. El 73% teme que se dé otro diagnóstico dentro de su familia y el 67% siente miedo por la recurrencia.
Casi la mitad de las encuestadas experimenta emociones negativas con bastante frecuencia: tristeza, inquietud, preocupación… aunque en este caso sí que la intensidad va disminuyendo con el paso del tiempo. Por otra parte, cerca de un tercio presentan problemas físicos como dolor (46%), fatiga (50%) y problemas cognitivos (50%) frecuentes, incluso muchos años después de finalizar el tratamiento.
Imagen corporal, sexualidad y economía
Otro de los elementos analizados es la preocupación por la imagen corporal: un 51% de las participantes la presenta. Además, un 53% reconoce tener problemas en el plano sexual de apenas disminuyen con el tiempo. Los tratamientos repercuten en una mayor sequedad vaginal, que se unen a esa preocupación por el aspecto, que también interfiere en las relaciones de pareja.
Por último, el estudio recoge datos sobre economía y ámbito laboral. Por un lado, el 23% de las encuestadas afirman haber experimentado problemas económicos, fruto de la pérdida de ingresos sufrida durante el proceso de tratamiento y del coste de productos y servicios asociados a la enfermedad: traslados, parafarmacia, etc.
En cuanto a los problemas laborales, se calcula que un 65% de las mujeres afectadas que se encontraban en edad activa al terminar el proceso de tratamiento experimentaron algún impedimento para hacer su trabajo. De hecho, casi un 40% aseguran sufrirlo con frecuencia, y un 30% notan habitualmente falta de apoyo o comprensión por parte de sus compañeros o jefes.
Las cifras de este informe se han elaborado con las respuestas de unas 1.300 pacientes de cáncer de mama que han superado la enfermedad tras finalizar su tratamiento, que han participado en una encuesta lanzada desde la AECC.
Mesa redonda y reconocimientos
Durante el encuentro también tuvo lugar una mesa redonda en la que participaron pacientes, supervivientes y profesionales de la psicología y la investigación, que han contado sus experiencias y han dado su punto de vista sobre esa merma de la calidad de vida tras el cáncer de mama. El evento ha servido además para entregar los premios al compromiso empresarial con esta patología, que han reconocido a El Corte Inglés, Estée Lauder y Primark.
«Nos interesa mucho incorporar la perspectiva laboral de las personas con cáncer en las empresas, y empezamos por mostrar cómo es la vuelta al trabajo de una mujer que tiene que reincorporarse tras superar un cáncer de mama. Porque el 68% de las personas que han pasado por esta enfermedad quieren volver al mundo laboral, no son números pequeños, y debemos trabajar entre todos para que lo consigan», comentó Isabel Orbe, directora general de la AECC.