En todo el mundo, sólo el 52% de los niños con VIH reciben un tratamiento que puede salvarles la vida, muy por detrás de los adultos, de los que el 76% reciben antirretrovíricos, según los datos de la ‘Actualización mundial sobre el Sida 2022’ del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA). Preocupados por el estancamiento de los progresos en los niños y la brecha cada vez mayor entre niños y adultos, el ONUSIDA, el UNICEF, la OMS y sus asociados han formado una alianza mundial para garantizar que ningún niño con VIH se vea privado de tratamiento para finales de la década y para prevenir nuevas infecciones por el virus entre los recién nacidos.
El establecimiento de la nueva ‘Alianza Mundial para Poner Fin al Sida en los Niños para 2030‘ fue anunciado en la Conferencia Internacional sobre el SIDA celebrada en Montreal (Canadá). «La amplia brecha en la cobertura del tratamiento entre niños y adultos es indignante«, señaló la directora ejecutiva del ONUSIDA, Winnie Byanyima. «Mediante esta Alianza canalizaremos esa indignación hacia la acción. Con la conjunción de los nuevos medicamentos mejorados, un nuevo compromiso político y el activismo decidido de las comunidades podemos ser la generación que ponga fin al sida en los niños. Podemos lograrlo, pero solo si nos unimos».
Además de los organismos de las Naciones Unidas, la Alianza incluye organizaciones de la sociedad civil, como la Global Network of People Living With HIV, gobiernos de los países más afectados y asociados internacionales, como PEPFAR y el Fondo Mundial. En la primera fase se han unido 12 países: Angola, Camerún, Côte d’Ivoire, Kenya, Mozambique, Nigeria, República Democrática del Congo, Sudáfrica, Tanzanía, Uganda, Zambia y Zimbabwe.
Acción colectiva
En las consultas de la Alianza se han determinado cuatro pilares para la acción colectiva:
– Cerrar la brecha de tratamiento para las adolescentes y mujeres embarazadas y lactantes con VIH y optimizar la continuidad del tratamiento.
– Prevenir y detectar nuevas infecciones por VIH entre las adolescentes y mujeres embarazadas y lactantes.
– Dar acceso a la realización de pruebas, tratamiento optimizado y atención integral para lactantes, niños y adolescentes con VIH o expuestos a ese virus.
– Atender los derechos, la igualdad de género y los obstáculos sociales y estructurales que dificultan el acceso a los servicios.
Motivos para la esperanza
En su intervención en la Conferencia Internacional sobre el SIDA, Limpho Nteko, de Lesotho, explicó que descubrió que era seropositiva a los 21 años, cuando estaba embarazada de su primer hijo. Esto la llevó hacia un viaje que ha desembocado en su trabajo para un programa pionero –mothers2mothers– dirigido por mujeres. La clave para una respuesta eficaz, señaló, es propiciar el liderazgo de las comunidades.
«Debemos acelerar todos juntos con el objetivo de poner fin al sida en los niños para 2030», dijo Nteko. «Para lograrlo, necesitamos una generación sana e informada de jóvenes que se sientan libres para hablar sobre el VIH y para obtener los servicios y el apoyo que necesitan para protegerse y proteger a sus hijos del VIH. mothers2mothers ha logrado la eliminación virtual de la transmisión maternoinfantil del VIH en quienes se han inscrito en nuestro programa durante ocho años consecutivos, lo que demuestra lo que puede lograrse cuando dejamos a las mujeres y las comunidades crear soluciones adaptadas a sus realidades».
Desde que se declararon los primeros casos de VIH hace más de 35 años, 78 millones de personas han contraído el VIH y 35 millones han fallecido por enfermedades relacionadas con el sida. Gracias al acceso a los tratamientos, la mortalidad por el sida ha disminuido un 57% entre las mujeres y niñas y un 47% entre hombres y niños desde 2010.
– A día de hoy, 39 asociaciones de pacientes dedicadas al VIH/sida son ya miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?