Ana Pastor, coordinadora de Participación Social del PP, junto a Jordi Ramentol, presidente de Farmaindustria.

«Todos somos o seremos pacientes». Con esta rotundidad se expresó Ana Pastor, coordinadora de Participación Social del Partido Popular (PP), en su intervención en el Foro Ideas+Diálogo en Sanidad, organizado en Madrid por Farmaindustria y Europa Press.

La figura del paciente, sus problemas, sus expectativas y, muy especialmente, su futuro, fueron ejes principales de una conferencia en la que la ex ministra de Sanidad pasó revista al Sistema Nacional de Salud (SNS), abordó el diagnóstico de sus dificultades actuales y enunció las propuestas y posibles soluciones que su partido propone para paliar una situación «marcada por un agujero presupuestario que ronda los 15.000 millones de euros».

Sagrado e intocable

Tras señalar que la sanidad es elemento fundamental del Estado y uno de los «pilares sagrados e intocables» para el partido al que representa, abogó por un plan estatal de salud, «que se hace imprescindible», y afirmó, categórica, que «la sanidad tiene solución y la tiene cuando se recupere la confianza y la productividad».

Coincidiendo con las palabras del presidente de Farmaindustria, Jordi Ramentol, en la presentación del debate, Pastor insistió en que «la sanidad no es el problema, sino la solución o una de las soluciones clave del problema». «Sanidad e innovación son elementos prioritarios para llevar el país hacia adelante», añadió.

El paciente, en el centro

«Nadie elige perder la salud», comentó. «Cuando un paciente acude al sistema sanitario tiene que recibir las mejores prestaciones y los mejores cuidados posibles. Él es el centro de todo lo que hacemos». En ese margen de mejora, afirmó, «es necesario cambiar el modelo de atención prestada a nuestros pacientes, pues la atención por proceso, además de ser mucho más efectiva y eficaz y aumentar la calidad final, ahorra al sistema hasta un 25% de los costes».

A la hora de perfilar las propuestas de futuro de su partido para garantizar la sostenibilidad del SNS, Pastor apuntó la necesidad de potenciar la investigación, «que se transformará en innovación, lo que en el plano de la salud se traduce en nuevo conocimiento y productividad aplicables a la prevención, diagnóstico, tratamiento y curación de enfermedades».

También abogó por la modernización del sistema español de I+D+i a través de, entre otras medidas, la colaboración entre la esfera pública y la privada, la coordinación de los organismos de gestión de la ciencia y la evaluación rigurosa de los resultados en los planos económico, tecnológico y científico. «Hablar del futuro es hacerlo de la investigación biomédica por lo que proponemos la puesta en marcha de un gran centro experimental de I+D+i». Cáncer, enfermedades cardiovasculares, procesos neurodegenerativos y osteoarticulares y enfermedades raras son los ámbitos en los que, en opinión de la conferenciante, se hará un mayor esfuerzo investigador.

Cartera de servicios

En relación con la equidad, defendió el «indispensable establecimiento» de una cartera común de servicios para paliar las diferencias interterritoriales y hacer del paciente el centro del proceso asistencial. Para ello, entre otras medidas, es prioritaria la introducción de la tarjeta sanitaria única en todo el país, la generalización de la receta electrónica y la potenciación de la libre elección de médico y de centro asistencial por parte del usuario.

En la parte final de su intervención, seguida por más de 500 asistentes, entre los que se contaban numerosos representantes de asociaciones de pacientes, la ex ministra volvió a referirse al futuro, «de cara al que debe plantearse la revisión de las políticas de recursos humanos del SNS que contemplan en la actualidad un sistema retributivo desmotivador; en muchos casos la ausencia de un verdadero desarrollo profesional y la cada día más frecuente situación de inestabilidad laboral de los profesionales».

Recortes, un error

Pastor ha calificado de error la decisión del Gobierno catalán de realizar recortes en la sanidad ante lo que piensa es sólo «un problema de reestructuración» e insistió en que los profesionales del sector deben recibir incentivos económicos en función de su eficacia a la hora de trabajar tanto a nivel individual como colectivo.

En el turno de preguntas posterior a la conferencia, y respondiendo al representante de una asociación que planteaba el papel de los pacientes en el buen funcionamiento del sistema, Pastor apostilló: «Todos somos pacientes, todos estamos implicados y tenemos que estar comprometidos con el mejor funcionamiento de un Sistema Nacional de Salud que demanda la colaboración de todos».