El Gobierno y el Consejo General de Colegios Farmacéuticos (CGCOF) han firmado el convenio para la futura puesta en marcha del ‘Programa de la Farmacia Comunitaria Rural’, protocolo nacional para la mejora de la atención sociosanitaria de la población residente en el ámbito rural a través de las oficinas de farmacia.
El medio rural cuenta en la actualidad con cerca de una cuarta parte del total de 22.137 oficinas de farmacia de nuestro país, ofreciendo cobertura a 7,6 millones de personas. De ahí la importancia del nuevo protocolo, con el que, explica Carolina Darias, titular del Ministerio de Sanidad, “damos un paso muy importante en la mejora de la atención sanitaria en este país. Este convenio va a permitir mejorar la asistencia sanitaria y social y la prestación de servicios farmacéuticos asistenciales. En el medio rural, la sanidad o es pública o no es sanidad”.
No en vano, destaca Teresa Ribera, vicepresidenta tercera del Gobierno y titular del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, “una oficina de farmacia es mucho más que un despacho de venta de medicamentos: es una referencia fundamental para una población crecientemente envejecida, y la asistencia que se puede prestar desde las farmacias es capital. La persona titular de la farmacia conoce a todos los vecinos y hace una labor de vigilancia, de faro, de todos los pacientes, gracias a su vocación de servicio público”.
Atención de calidad
El ‘Programa de la Farmacia Comunitaria Rural’, suscrito, además de por el CGCOF y los ministerios de Sanidad y Transición Ecológica, por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, se centra en siete áreas de trabajo a desarrollar desde las oficinas de farmacia, entre las que destacan las acciones para garantizar el acceso a los medicamentos y productos sanitarios y de salud en condiciones de igualdad efectiva y con la debida suficiencia en el abastecimiento.
Asimismo, las farmacias también llevarán a cabo iniciativas para la prevención y promoción de hábitos de vida saludable; la detección temprana de situaciones de soledad y la información sobre recursos y servicios sociales para evitar el aislamiento social; y la detección temprana de situaciones de vulnerabilidad de personas con discapacidad, alzhéimer u otras demencias.
En definitiva, a través de este programa se busca dar respuesta a la necesidad de garantizar una atención sanitaria de calidad para la población del medio rural, que como recuerda Carolina Darias, “es un requisito imprescindible para permitir que las personas puedan desarrollarse y tener oportunidades vivan donde vivan”.
Jesús Aguilar, presidente del CGCOF, concluye que “este debe ser el primer paso del que esperamos sea un largo camino para, entre todos, dotar de futuro a la España rural y garantizar la viabilidad económica de las farmacias en estos municipios, desde el impulso a la innovación –desde el liderazgo tecnológico que tenemos como red conectada y capilar– y siempre prestando con una atención cercana y personalizada. Una red sanitaria de conocimiento, aliada fundamental por su arraigo territorial, que además hemos visto que contribuye a frenar la pérdida de población, y a generar empleo e impacto económico positivo”.
