La Federación Nacional de Enfermos y Trasplantados Hepáticos (FNETH) y la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (COCEMFE), miembros de Somos Pacientes, han reclamado la puesta en marcha de medidas para evitar el esperable incremento de pacientes afectados por la hepatitis C, enfermedad que genera un elevado número de casos de discapacidad y de la que, solo en los próximos 10 años, se espera se diagnostiquen de manera espontánea más de 150.000 casos muy graves.
En palabras de Antonio Bernal, presidente de FNETH, “la Organización Mundial de la Salud (OMS) y los especialistas en España llevan tiempo advirtiendo del grave problema que van a suponer los pacientes no diagnosticados de hepatitis C y que se espera un pico de diagnóstico espontáneo, en 10 años, de pacientes con cáncer hepático, cirrosis y estadios muy graves de la enfermedad. Todos estos pacientes, si se detectan, se diagnostican y tratan ahora, dejarán de ser un grave problema en el futuro”.
Y en este contexto, como apunta Mario García, presidente de COCEMFE, “una cuestión muy importante para nuestro colectivo es la prevención de enfermedades que terminan causando discapacidades. Por ello, apostamos por reducir la incidencia y la prevalencia de enfermedades como la hepatitis C, y que se desarrollen políticas de salud públicas dirigidas a atenuar las consecuencias negativas de estas patologías, asegurar una acción preventiva con seguridad y calidad y una firme apuesta por las terapias y tratamientos que han demostrado tener los mejores beneficios sobre la salud”.
Tratamientos efectivos
El número de casos de hepatitis C están aumentando cada año en cantidad y en grado. De hecho, se estima que el retraso en la detección y su tratamiento supone cada año más de 10.000 nuevas personas discapacitadas orgánicas. Y como alertan FENTH y COCEMFE, “si se tiene en cuenta que falta diagnosticar a más de 400.000 enfermos silentes, habrá un mínimo de 150.000 que pasarán a engrosar el número de personas con discapacidad en los próximos 10 años, con el agravante de que en la mayoría de los casos serán dependientes”.
A este respecto, la nueva normativa contempla un catálogo de políticas dirigidas a la prevención de problemas de salud para, de esta manera, reducir la incidencia y la prevalencia de ciertas enfermedades, lesiones y discapacidades y atenuar sus consecuencias negativas.
Una normativa que, asimismo, también dispone los procedimientos para asegurar la calidad y la seguridad de la acción preventiva –entre otras, prevención de lesiones, vacunaciones y detección precoz de la enfermedad– en nuestro país, siempre como una acción coordinada multidisciplinar y con acciones en todos los ámbitos sanitarios.
Pero como incide Antonio Bernal, “cuando llegue el pico de casos se montarán comités permanentes de especialistas, para intentar poner soluciones que hoy ya se conocen y son efectivas: ¿Por qué esperar a que sea irreversible? Se podrían evitar muchos casos de discapacidad”.
Y en este sentido, debe recordarse que ya en la actualidad existen tratamientos para curar la infección de la hepatitis C, que “no tienen por qué ser los más costosos, cuando se diagnostica a pacientes en estadios leves, ya que en estas fases iniciales se muestran más efectivos, con menos efectos secundarios y menor tiempo de tratamiento”, concluyen FNETH y COCEMFE.
– A día de hoy, la Associació Catalana de Malalts d’Hepatitis (ASSCAT) y la Federación Nacional de Enfermos y Trasplantados Hepáticos (FNETH), asociaciones de pacientes dedicada a las enfermedades del hígado, ya son miembros de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?