Las enfermedades cardio y cerebrovasculares (ECV) son responsables del 31,2% de las muertes que se producen en nuestro país. De hecho, España es, junto con Francia, Eslovenia y Países Bajos, el único país de del continente donde las ECV no constituyen la primera causa de mortalidad global. El dato, sin embargo, no puede aplicarse a la población femenina, en la que estas patologías se presentan como la principal causa de deceso en todos y cada uno de los países europeos y de la UE27.
Los datos se derivan del último Informe ‘Estadísticas Europeas de la Enfermedad Cardiovascular’ de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC) y la Red Europea del Corazón (EHN), que muestra que el número de fallecimientos por estas enfermedades ha descendido en los últimos años tanto en la UE –1,9 millones de muertes anuales (el 40% de todos los decesos), frente a 2 millones en 2008 (42%)– como en el conjunto del continente –4 millones de muertes anuales (47%), por 4,3 millones en 2008 (48%).
Mujeres y varones
Por lo que respecta específicamente a la población masculina, y de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) de 2010, las ECV representan el 27,46% del total de fallecimientos. A nivel europeo, los datos del informe de la ESC y la EHN reflejan la enorme disparidad existente en el continente: desde el 25% en Francia hasta el 60% en Bulgaria.
En el caso de las mujeres, la tasa de fallecimientos por ECV sigue creciendo en todo el continente, muy especialmente por el incremento de las enfermedades cerebrovasculares, a día de hoy las más prevalentes. En nuestro país, el 35,19% de las mujeres –por un 50% en Europa– fallecen por ECV. Y el 27% por un episodio cerebrovascular. En el caso del continente, una vez más, el informe europeo refleja las enormes disparidades existentes: desde la tasa del 25% en Francia hasta un índice del 70% en Bulgaria.
Estrógenos y menopausia
Como explica el Dr. Leandro Plaza, presidente de la Fundación Española del Corazón (FEC), «la disminución de la mortalidad por enfermedad cardiovascular en los hombres se debe a que históricamente estas enfermedades han sido consideradas masculinas, por lo que hace más años que la población ha tomado conciencia sobre la importancia de prevenirlas».
Por el contrario, el aumento progresivo de la mortalidad en la población femenina se debe a que, «a partir de la menopausia –recuerda el Dr. Plaza–, la mujer deja de recibir la protección natural de los estrógenos y, con ello, se multiplican los factores de riesgo cardiovascular, produciéndose más diabetes, hipercolesterolemia y obesidad; a partir de los 55 años, la prevalencia empieza a subir hasta situarse muy por encima de la masculina».
A todo ello se suma el cambio en el estilo de vida de las mujeres. «El estrés del día a día, el aumento en el consumo de tabaco y, sobre todo, la alimentación poco cardiosaludable que siguen como consecuencia de comer fuera de casa, también favorece la aparición y evolución de estas enfermedades», concluye el presidente de la FEC.
Carga económica
La tasa de mortalidad por ECV está disminuyendo en todo el continente, muy especialmente en los países del centro y el este de Europa. Así, a modo de ejemplo, entre 2003 y 2009 la tasa de mortalidad por las cardiopatías disminuyó en Rusia desde 251 muertes por 100.000 habitantes hasta 186 . Las cifras, sin embargo, se encuentran aún muy alejadas de las que presenta, por ejemplo, Reino Unido (33 muertes por 100.000 habitantes) y, sobre todo, Países Bajos (16 por 100.000).
Sea como fuere, la carga económica asociada a estas enfermedades sigue siendo descomunal. El informe de la ESC y la EHN estima que el gasto a anual por estas las ECV en el conjunto del continente asciende a 196.000 millones de euros. Así, el impacto sobre cada sistema nacional de salud se estima en 212 euros por persona y año.
– Para descargar (en inglés) la versión completa del Informe ‘Estadísticas Europeas de la Enfermedad Cardiovascular’ pincha aquí y luego en el apartado ‘Download – European cardiovascular disease statistics 2012 (5.74mb)’.
– A día de hoy, 24 asociaciones de pacientes dedicadas a las enfermedades cardio y cerebrovasculares ya son miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?