Desde su entrada en vigor en enero de 2011, un total de 687 padres y madres de niños enfermos de cáncer y otras enfermedades graves han recibido la nueva prestación de la Seguridad Social para poder cuidar de sus hijos.
Del total de ayudas, y según los datos del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) y de las Mutuas de Accidentes de Trabajo y Enfermedad Profesional, 246 fueron concedidas a padres con hijos enfermos de cáncer, mientras que 409 correspondieron a progenitores cuyos hijos padecían una enfermedad grave no oncológica.
907 solicitudes en un año
En el primer año de vigencia de este subsidio, la Seguridad Social recibió 907 solicitudes, de las que la mayoría (812) fueron tramitadas a través de las mutuas, siendo finalmente admitidas 655. De éstas, un total de 555 corresponden a trabajadores del Régimen General, cuatro a trabajadores por cuenta ajena de otros regímenes y 96 a trabajadores inscritos por cuenta propia.
La norma que rige este subsidio establece que se pueden beneficiar aquellos trabajadores por cuenta ajena, afiliados y en alta que, con independencia de su sexo, reduzcan su jornada de trabajo al menos un 50%.
La prestación económica del subsidio se calcula sobre el 100% de la base reguladora establecida para la prestación por incapacidad temporal, derivada de contingencias profesionales. Su finalización tiene lugar cuando cesa la necesidad del cuidado directo, continuo y permanente del menor o cuando éste cumple 18 años.