Por la educación y el empleo de las personas con autismo

Como recoge la resolución 62/139 de la ONU en la que designó este Día Mundial, “el autismo es una discapacidad permanente del desarrollo que se manifiesta en los tres primeros años de edad; la tasa del autismo en todas las regiones del mundo es alta y tiene un terrible impacto en los niños, sus familias, las comunidades y la sociedad”.

Como indica António Guterres, secretario general de la Organización, en su mensaje por la efeméride, “las personas con autismo tienen derecho a la libre determinación, a la independencia y a la autonomía, así como a la educación y el empleo en igualdad de condiciones. El colapso de sistemas y redes de apoyo vitales como resultado del COVID-19, sin embargo, exacerba los obstáculos a los que deben enfrentarse las personas con autismo para ejercer estos derechos. Debemos asegurarnos de que una interrupción prolongada causada por la emergencia no resulta en un retroceso de los derechos que con tanto esfuerzo han defendido las personas con autismo y las organizaciones que las representan”.

La presente edición de la efeméride se centrará en la transición a la edad adulta de las personas con trastornos del espectro autista (TAE), incidiendo en aspectos como la participación en la cultura juvenil, la autodeterminación y la toma de decisiones de la comunidad, el acceso a la educación postsecundaria, el empleo y la vida independiente.

Como recuerda la ONU, “convertirse en un adulto generalmente se equipara con convertirse en un participante pleno e igualitario en la vida social, económica y política de la comunidad. Sin embargo, la transición a la edad adulta sigue siendo un desafío importante para las personas con autismo debido a la falta de oportunidades y apoyo dedicado a esta fase de su vida”.

De hecho, continúa la Organización, “la finalización de la escuela secundaria, cuando la educación y otros servicios apoyados provistos por algunos gobiernos tienden a cesar, a menudo se ha comparado con ‘caerse por un precipicio’”.

Además, el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo se celebrará en el contexto  de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y en la Década de Acción puesta en marcha por la ONU para alcanzar los Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) en la fecha límite de 2030 acordada por los líderes mundiales.

No en vano, y si bien se está avanzando en la implementación de algunos de los ODS, caso de la reducción de la pobreza extrema y de las tasas de mortalidad infantil, se requiere una respuesta mucho más profunda, rápida y ambiciosa para desencadenar la transformación social y económica necesaria para alcanzar los objetivos en 2030.

Como denuncia António Guterres, “la desigualdad continúa aumentando y los grupos marginados, como las personas con discapacidad, continúan enfrentando múltiples desventajas, negándoles oportunidades de vida y derechos humanos fundamentales. Por tanto, se necesitan mayores esfuerzos para crear una sociedad inclusiva y garantizar la igualdad de derechos para las personas con discapacidad, incluido el autismo, según lo dispuesto por la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de las Naciones Unidas”.

El movimiento asociativo europeo celebrará la presente edición de la efeméride bajo el lema ‘Puedo aprender. Puedo trabajar’, a la sazón título de la campaña puesta en marcha por Autismo Europa –y secundada en nuestro país por la Confederación Autismo España y la Federación Española de Asociaciones de Padres de Personas con Autismo (FESPAU)– para aumentar la concienciación social sobre dos áreas fundamentales para la inclusión y mejora de la calidad de vida del colectivo: la educación y el empleo.

En los últimos cinco años se ha producido un significativo incremento, de más de un 118%, del alumnado con TEA. Un alumnado que no solo presenta un mayor riesgo de acoso escolar, sino también una mayor tasa de abandono al finalizar la Educación Secundaria.

Como alerta la FESPAU, “se ha detectado que la orientación vocacional y las experiencias de prácticas no están suficientemente desarrolladas, así como que no hay conexión entre las últimas etapas educativas con los servicios de empleo. Todo ello provoca que las tasas de desempleo en el autismo sean más altas que entre las personas con discapacidad intelectual u otros trastornos del desarrollo. De hecho, se estima que más del 90% de las personas con TEA están desempleadas, debido en gran medida a la falta de servicios de apoyo para adultos, así como a una falta generalizada de comprensión sobre las capacidades de las personas con TEA y su potencial laboral”.

Para más información sobre la campaña ‘Puedo aprender. Puedo trabajar’ clica aquí.

Es más; Autismo España ha puesto en marcha, en el marco de la iniciativa global ‘Light It Up Blue’, una campaña para reclamar la comprensión y el respeto del conjunto de la sociedad hacia las personas con TEA y sus acompañantes en sus paseos por la calle, salidas que responden a circunstancias de fuerza mayor amparadas por la legislación pero que, en ocasiones, son acompañadas de increpaciones e insultos desde ventanas y balcones.

Como explica Autismo España, “este año hemos adaptado esta iniciativa a la situación de crisis sanitaria que vivimos, proponiendo demostrar de manera diferente esa solidaridad con las personas con TEA, sus familias y todas aquellas personas que están ayudando a nuestro colectivo. ¿Cómo? Sumándote al reto #LIUB e iluminando tu terraza, balcón o ventana este 2 de abril a las 21:00 horas. No es necesario usar una luz azul. Puedes sumarte utilizando tu móvil, una linterna o cualquier otra fuente de luz”.

Es más; la Confederación ha habilitado un Canal de Incidencias en línea para que las personas con TEA, sus familias y los profesionales vinculados al colectivo puedan comunicar las posibles situaciones de vulneración, desprotección e inseguridad que están sufriendo ante la crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19. Para más información sobre el canal clica aquí.

En este contexto, la Reina Doña Letizia ha mantenido una reunión telefónica con Miguel Ángel de Casas, presidente de Autismo España, para mostrar su solidaridad con las personas con TEA, sus familiares y los profesionales que las atienden ante los insultos e increpaciones, y trasladar su preocupación por la situación que atraviesan las personas con TEA cuando son hospitalizadas por la infección por el coronavirus.

– A día de hoy, 14 asociaciones de pacientes dedicadas a los trastornos del espectro autista (TEA) son ya miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?