El perfil del paciente medio ahora es de riesgo medio y bajo
Disminuye la edad media de los pacientes tratados con radioterapia por cáncer de próstata
La edad media del paciente con cáncer de próstata tratado en las consultas de Oncología Radioterápica es cada vez más baja, gracias principalmente a un diagnóstico y un tratamiento más temprano. Así lo ha afirmado el doctor José López Torrecilla, de la Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR), según el cual «el 81% de los pacientes tratados actualmente en nuestros servicios son casos en los que la enfermedad no ha salido de la cápsula prostática y en los que existe una mayor probabilidad de control de la patología». En resumen, el perfil del paciente ha pasado de ser de alto riesgo, con tumores en estado avanzado, al de un paciente de riesgo medio y bajo, lo que se traduce en una mayor tasa de curaciones.
Estos datos, provenientes del estudio CAPORT y presentados con ocasión de la V Reunión de Investigadores que han organizado en Madrid el Grupo de Investigación Clínica en Oncología Radioterápica (GICOR) y la SEOR con el patrocinio del laboratorio farmacéutico Astellas Pharma, señalan que tan sólo el 2% de los pacientes con cáncer de próstata se tratan con intención paliativa, el resto se hace con intención curativa. «De los pacientes tratados con cáncer de próstata en los Servicios de Oncología Radioterápica con intención curativa, el 78% se tratan sólo con irradiación, asociada o no a hormonoterapia, y el otro 20% tras haber sido tratados con cirugía«, asegura López Torrecilla.
Avances lentos pero continuos
Según este especialista, «los adelantos en la investigación del cáncer son siempre lentos pero continuos; los últimos avances en este campo han estado enfocados a los equipamientos de los Servicios de Oncología Radioterápica con aceleradores que permiten técnicas más precisas, que aumentan la dosis y disminuyen la toxicidad aguda y crónica».
Actualmente, la mayoría de los pacientes reciben los tratamientos de forma ambulatoria y en muchos casos sin interferir en su vida habitual, de tal forma que «los tratamientos que se combinan con fármacos como la hormonoterapia, que potencia el efecto de la radioterapia, están consiguiendo mayores tasas de respuesta tanto locales como de supervivencia«.