Las Unidades de Memoria realizaron dos talleres de estimulación cognitiva cada semana, de dos horas de duración cada uno, a lo largo de todo el curso. El éxito de la experiencia ha hecho que otros municipios rurales gallegos quieran sumarse a la iniciativa.
El objetivo de esta iniciativa es impedir que el hecho del coste económico de un recurso necesario para la persona afectada con una demencia suponga no poder acceder a él y evitar que las familias con escasos recursos económicos renuncien a un espacio y tiempo de respiro en el cuidado de la persona dependiente.
