Las desigualdades en el acceso a los servicios sociales y sanitarios son cada vez mayores
Los recortes merman los derechos de las personas con discapacidad gravemente
Los planes de austeridad implantados en los países europeos como consecuencia de la crisis económica han tenido un impacto ‘muy negativo’ en los derechos de las personas con discapacidad. Así lo muestra el informe ‘Impacto de los planes de austeridad de los gobiernos europeos y de España sobre los derechos de las personas con discapacidad’ comisionado por el Consorcio Europeo de Fundaciones sobre Derechos Humanos y Discapacidad, en el que se observa que las tasas de desempleo y riesgo de pobreza de las personas con discapacidad han “aumentado desproporcionadamente” desde el inicio de la crisis y cómo los servicios sociales se han visto “gravemente afectados” por las medidas de austeridad.
Es más; los perjuicios derivados de las políticas de austeridad no han afectado por igual a todo el colectivo de la discapacidad. Como explica Alberto Durán, vicepresidente ejecutivo de Fundación ONCE, “los más perjudicados por el contexto económico son las mujeres y los jóvenes con discapacidad, que atraviesan una situación dramática; por tanto, debe concienciarse a la sociedad, las administraciones públicas y los agentes privados para que los ajustes se hagan con solidaridad e inteligencia, y que esto no redunde en los más desfavorecidos”.
Crecen las desigualdades
El informe confirma cómo las personas con discapacidad están experimentando “cada vez más desigualdades” en el acceso a los servicios sociales y sanitarios. Una situación que resulta especialmente significativa en el sector de la educación, “particularmente afectado” por las medidas de austeridad.
Por ello, como destaca Luis Cayo Pérez Bueno, presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), miembro de Somos Pacientes, “los retos futuros de la discapacidad pasan por mantener las cuotas de inclusión de derechos y bienestar alcanzados, hacer una toma de conciencia que favorezca la activación del colectivo y revisar las políticas de discapacidad desde la perspectiva de los derechos humanos”.
Y es que como apunta Miguel Ángel Cabra de Luna, director de Relaciones Sociales e Internacionales y Planes Estratégicos de Fundación ONCE “las personas con discapacidad no deberían asumir los costes de la situación actual; no es momento de retroceder más en el ámbito de la discapacidad, por lo que se hace necesario buscar soluciones creativas que nos permitan continuar el camino que empezamos hace unos años para alcanzar la plena inclusión de las personas con discapacidad y sus familias”.
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– A día de hoy, 58 asociaciones de pacientes dedicadas a la discapacidad y a la dependencia son ya miembros activos de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?