La Federación Española de Diabetes (FEDE), miembro de Somos Pacientes, ha elaborado con la colaboración de cinco sociedades científicas y sanitarias el decálogo ‘10 medidas para mejorar la calidad de vida de las personas con diabetes tipo 2 insulinizadas’ para lograr que, a través del acceso a la innovación, este grupo de pacientes puedan disponer de los mejores tratamientos para el buen control de su enfermedad.

El decálogo, elaborado con la colaboración de la Sociedad Española de Diabetes (SED), la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), la Red de Grupos de Estudio de la Diabetes (redGDPS) y el Consejo General de Enfermería (CGE), apuesta por el tratamiento individualizado del paciente con diabetes tipo 2 y su participación dentro del Sistema Nacional de Salud (SNS).

Como explica FEDE, “las personas con diabetes tipo 2 son un colectivo muy diverso con necesidades específicas en cuanto al tratamiento. Algunas de ellas, concretamente las que están en tratamiento con insulina, se encuentran con muchas limitaciones en comparación con las personas con diabetes tipo 1 a la hora de acceder a determinados avances y nuevas tecnologías, como pueden ser los sistemas de monitorización de la glucosa en líquido intersticial”.

Tratamiento individualizado

Concretamente, el documento incluye cinco apartados de medidas en diferentes áreas: educación y formación, en la que se destaca la necesidad de una educación diabetológica de calidad y continuada en el tiempo tanto para pacientes como para familiares; telemedicina e innovación; individualización y tratamiento; ahorro e inversión, y participación e influencia.

En palabras de Aureliano Ruiz Salmón, miembro de la junta directiva de FEDE, “es muy importante poner de manifiesto el problema de desigualdad en el acceso a nuevos tratamientos que tienen las personas con diabetes tipo 2 en tratamiento con insulina. Somos un colectivo que necesita de las nuevas tecnologías para mejorar nuestra calidad de vida y, de no ser así y sumado a una escasa educación diabetológica, va a continuar aumentando su incidencia y complicaciones, así como sus costes, que actualmente superan los 23.000 millones de euros al año”.

Como concluye la doctora Noemí González Pérez de Villar, secretaria de la SED, “no existe la diabetes tipo 2, sino personas con diabetes tipo 2. Nuestro objetivo no es solo conseguir un control de la glucemia óptimo, sino hacerlo de forma personalizada, adecuada a las características y comorbilidades que cada paciente presente, y utilizando todas las herramientas terapéuticas disponibles. Estas herramientas no son solo medicamentos, sino también sistemas de monitorización continua de la glucosa que permiten conocer con gran exactitud y en tiempo real sus variaciones y adaptar el tratamiento de manera individualizada y acorde a cada situación. Solo así, y gracias a una educación terapéutica de base, obtendremos mejores resultados en salud”.

Para consultar el decálogo clica aquí.

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