El libro infantil ‘La anestesia y los niños’ también ofrece consejos para los padres
Cuento para paliar el miedo de los niños ante una intervención quirúrgica
El miedo al dolor y a la separación de sus padres son dos de los temores más comunes en los niños que han de someterse a una intervención quirúrgica. Unos temores que les generan una gran ansiedad y que se ven incrementados por su desconocimiento de los aspectos relacionados con la cirugía. Por ello, el doctor Andrés López García, jefe de servicio de Anestesiología y Reanimación de HM Hospitales, ha editado el libro infantil ‘La anestesia y los niños’ con el objetivo de transmitir seguridad, afecto y confianza a los más pequeños que tienen que someterse a una operación.
En palabras del doctor López García, «aunque sea un tópico, los pacientes pediátricos no son adultos pequeños y, si queremos ganarnos su confianza y evitar que sufran innecesariamente, necesitan explicaciones coherentes con la situación que viven en cada momento».
Y como explica el autor de la obra, «la naturalidad es la mejor forma de acercarse a un paciente pediátrico. Hay que intentar explicarle de forma comprensible lo que tenemos que hacer sin engaños, evitando las prisas y en un ambiente tranquilo«.El cuento, ilustrado por Ania, paciente de 12 años del hospital, también tiene un espacio dirigido a los padres en el que se les informa de todos aquellos aspectos relacionados con la intervención que puedan preocuparles.
‘La anestesia y los niños’
La obra expone, de una manera comprensible y con ilustraciones que ayudan a entender el texto, las diferentes vías en las que se realiza la técnica anestésica. Como apunta el doctor López García, «en la mayoría de los casos no se entienden bien las diferencias entre las distintas técnicas que se emplean (sedación consciente o inconsciente, anestesia general, etc.). En este sentido, los padres tienen muchas dudas acerca de los riesgos que la anestesia puede tener para el niño, unas inseguridades que en ocasiones pueden estar relacionadas con la preparación los niños requieren antes de la anestesia, por ejemplo, que estén en ayunas antes de la intervención».
Así, la obra explica que, con objeto de paliar sus miedos, los niños reciben una premedicación oral con efecto tranquilizante 20 minutos antes de entrar en quirófano, lo que también favorece que el proceso no se almacene en la memoria del propio niño. Y además, “en la medida de lo posible, procuramos que uno de los padres pueda entrar en el área quirúrgica para acompañar al menor en el despertar”, recuerda el Dr. López García.
Asimismo, el libro aconseja que la información que se le procura al niño sea diferente en función de su edad. “Es muy importante explicarles dónde van a estar sus padres durante la intervención y que cuando despierten, uno de ellos podrá acompañarle. También hay que asegurarles que la anestesia servirá para que durante la operación no les duela nada y que es normal sentirse mareado o adormilado en el despertar”, aclara su autor.
Finalmente, y por lo que respecta a los padres, se hace necesario evitar el uso de un lenguaje amenazante, caso de “si no te portas bien te van a pinchar”, “te hacen respirar un gas” o “con una inyección te duermen”. Y de la misma manera, concluye el doctor López García, “los gestos y las emociones de los padres deben ser moderados, ya que si el niño ve que sus padres están llorando, se asustará. Hay que transmitir confianza para que la intervención quirúrgica no sea una experiencia traumática para el menor”.